El 55% de las empresas planean subir el sueldo a sus trabajadores

Y el 69 por ciento contratarán más empleados

La economía es una familia compuesta de muchos miembros que caminan de la mano. En épocas de recesión, la precariedad se hace vigente y en el mercado laboral los salarios descienden, en ocasiones. En temporada de bonanza sucede lo mismo, la situación mejora y con ello la prestación laboral a los trabajadores. España se encuentra en ese momento de crecimiento, por lo que el 55 por ciento de las empresas planean subir el salario a sus trabajadores.

Es un dato extraído de la ‘Guía del Mercado Laboral 2016’, elaborado por la multinacional británica Hays. En él, también se hace eco de cómo avanza dicho mercado. El Managing Director de Hays España, Christopher Dottie, afirma que aunque la economía en nuestro país progresa adecuadamente, sólo el 10 por ciento de las empresas han superado la crisis por completo, una cifra baja pero la cual ha crecido siete puntos porcentuales respecto al informe de 2015. Sin embargo, la mayoría del tejido no comparte esta afirmación porque un 47 por ciento opina que la situación sí ha mejorado, pero sólo un poco.

Aún con todo, tres de cada cuatro trabajadores muestran una actitud positiva respecto al mercado. “Con muy buen sabor de boca podemos afirmar que existe un optimismo moderado que se está reflejando, sin duda, en el Mercado Laboral”, explica Dottie. Aliento que se refuerza con otros datos del informe, que el 55 por ciento de las empresas no despidieron alguno de sus trabajadores durante el pasado año, se redujo 11 puntos aquellas que llevaron a cabo una congelación salarial y el 69 por ciento prevé contratar más empleados. Los trabajadores también se sienten más seguros, pues el porcentaje de aquellos que temían perder sus empleos se han reducido desde el 77 al 74 por ciento.

El paro, una asignatura pendiente

Pese a todo, el desempleo continúa siendo una asignatura pendiente, sobre todo el de larga duración, el juvenil y el de las personas mayores de 45 años. A la hora de contratar, las empresas buscan al mejor y más en épocas  de recesión. Esta intención se ha reforzado durante los pasados años y ha hecho florecer un importante problema: la gran brecha que existe entre las necesidades de una empresa y la preparación de sus trabajadores, obstáculo del que se hacen eco el 56 por ciento de los dirigentes de las compañías.

Sin embargo, el más preocupante es el que afecta a la población menor a 25 años. Según las universidades y escuelas de negocios, se podría reducir con una mayor implicación de las empresas en la materia porque el 63 por ciento de los estudiantes de estos centros de enseñanza están bastante preparados para salir al Mercado Laboral. Llegados a este punto, ¿dónde está el problema? El 93 por ciento culpan a la brecha entre la preparación de los jóvenes y lo que demandan las empresas, la cual debería acortarse.

Desmotivación en el empleo

La productividad camina de la mano de la motivación en el trabajo. Cuanto mayor sea esto último mayores serán los resultados de la compañía. Pero esta motivación hay que trabajarla desde todos los ámbitos: las altas esferas, los compañeros y las recompensas por el trabajo bien realizado. Hay otra, y es que el 61 por ciento de los encuestados afirman que en su empresa no se valora a las personas por meritocracia, sino que priman otros aspectos no laborales.

Los malos años pasados han provocado una reducción en el salario de muchos trabajadores, al igual que retrasos a la hora de abonar sus nóminas, comportamientos que han llevado a una desmotivación en su plantilla y, por consiguiente, la búsqueda de otro empleo.  Y es que sólo un 40 por ciento de la población activa se siente satisfecho con su salario, un porcentaje que aumentó ligeramente debido al incremento salarial en un ínfimo 33 por ciento del conjunto de trabajadores.

Yasmina Pena