El Greco o Picasso, dos grandes que los niños deben conocer

Los dos son pintores, aunque cada uno de una época diferente, aunque eso sí, el segundo se inspiró en el primer. El arte nunca es aburrido, pero hay que captar la atención de los receptores y más si se trata de niños.

El Greco, originario de Grecia, pasó Italia antes de pasar por España y quedarse en la ciudad imperial de Toledo, donde puso su taller a disposición sobre todo de la Conferencia Episcopal. Le acusaban de que sus pinturas no animaban a la oración, por eso, no se ganó el favor del ferviente católico Felipe II. Era de carácter fuerte y fue el primero que se hizo un selfie en una de sus obras, los conocidos como autorretratos. Sus figuras son alargadas y pinta el blanco sobre blanco como nadie hasta el momento. Este año es el cuarto centenario de su muerte y Toledo se viste de gala. ¿Animas a tus hijos a que conozcan más al artista? Anaya ha sacado una edición muy especial con «La perla de El Greco» con textos de Lucía González Piquín y las ilustraciones de Goyo Rodríguez.

Y de El Greco a Pablo Picasso, quien tuvo muy complicado ganarse el favor de la critica y el academicismo. No le aceptaban porque no era un clásico, ni en sus formas, ni en sus composiciones. Las palabras de «esto lo hace mi niño» se dicen mucho con sus pinturas pero ¿Quién es capaz de romper así con la pintura tradicional? Nadie nada más que Picasso. Aficionado a las mujeres, a la pintura y a la tauromaquia cambió el rumbo pictórico de la época y se ha hecho un hueco en la historia del arte. «Mi primer libro sobre Picasso» dará muchas pistas a mayores y pequeños sobre este gran artista. Con textos del historiador del arte, Rafael Jackson con ilustraciones de María Esplugas.