El IBEX sube un 1,63% en la semana

Comentario de Francisco Sánchez-Matamoros, analista de XTB

 

Terminamos una de las semanas más agitadas en lo que llevamos de año con el Ibex35 cerrando en el entorno de los 9.700 puntos. En esta septenaria marcada por la volatilidad, el selectivo doméstico tuvo un comportamiento de menos a más, finalizando la semana con perspectivas positivas. Tras las elecciones italianas, en las que no se termina de vislumbrar una formación de gobierno en el medio plazo, los mercados europeos plegaron velas en la apertura del lunes. El Ibex35 se dejaba un 1,5% pero consiguió cerrar el día prácticamente recuperando los niveles del viernes pasado. El anuncio de aranceles a los metales por parte de Donald Trump y la reunión del BCE de ayer jueves terminaron de insuflar movimiento a las bolsas.

Cabe destacar los nuevos acontecimientos sobre la OPA de Abertis. Tras un primer movimiento de Atlantia, subiendo su dividendo para hacer más atractiva su acción, conocimos la negociación entre Atlantia y ACS, para adquirir de manera conjunta los activos de Abertis. Tras incrementar su precio con sus pujas, – recordemos que Abertis se ha revalorizado más de un 30%-, deciden hacer una oferta conjunta y así evitar un conflicto entre los conglomerados. La noticia fue bien acogida por ACS, subiendo ayer un 8%, mientras que Abertis se desvanecía un 4%.

El valor estrella de la semana fue Cellnex, que despunta con alzas de doble dígitos, tras una mejora sustancial de recomendación de compra por parte de la casa de análisis RBC, elevando su precio objetivo hasta los 26€.. El devenir de la semana estuvo claramente marcada por la evolución negativa del petróleo. El oro negro se desplomaba 2$ a lo largo de la semana, penalizando a valores vinculados al mismo. Valores como Técnicas Reunidas o Repsol cierran la semana en números rojos.

A nivel doméstico, seguimos con el bloqueo a la situación en Cataluña. La falta de concreción de cara a la formación de gobierno por parte de los partidos secesionistas continúa lastrando la evolución del índice, que no hace más que dilatar la actual y enquistada situación.

A nivel internacional sí que hemos presenciado numerosos catalizadores. Las elecciones italianas generaron dudas en Europa, siendo negativo para las bolsas. El anuncio de aranceles para el acero y el aluminio por parte de Donald Trump volvió a incrementar la volatilidad del mercado al cierre del martes. El presidente de los EEUU se está convirtiendo en el principal agitador de los mercados con anuncios completamente inesperados como este. La reunión del BCE, donde Mario Draghi eliminó su ya famoso «si fuera necesario», refiriéndose a la posibilidad de incrementar los instrumentos de política monetaria expansiva si el mercado lo requiere, fue quizás lo más relevante de la semana. En un tono claramente «dovish», pese a esta modificación, el mandatario del BCE lanzó un mensaje de continuidad a los mercados de cara a sus políticas actuales. Finalizamos la semana con los datos «no farm payrolls», de paro no agrícola en los EEUU. Con una lectura mejor de lo esperado pero con una tasa de paro ligeramente peor de lo previsto. Los inversores han comprado esa lectura como alcista para las bolsas.

Las principales bolsas americanas recuperan la tendencia alcista, situándose a las puertas de sus máximos históricos. Situación diferente la de las bolsas europeas, que sufren con la fortaleza del euro frente al dólar. El cruce se mantiene por encima de los 1,2280, muy cerca de sus máximos en los últimos 4 años. En cualquier caso, la posible tendencia a la baja del Euro/Dólar debiera insuflar argumentos alcistas para las bolsas europeas. Muy rezagadas en los últimos meses frente a sus análogas americanas. El Nasdaq americano acumula subidas en 2018 cercanas al 9% mientras que el DAX alemán o el Ibex35 se dejan cerca del 4%.

De cara a la próxima semana, donde esperamos continuidad del actual tono de la segunda mitad de semana, conoceremos los relevantes datos de inflación subyacente en EEUU. La buena evolución de la macro en Europa, apoyado por una caída sustancial del euro frente al dólar debiera permitir al Ibex35 alcanzar su próximas resistencias, situadas en los 9.870 puntos. De no perder los cierres semanales en la apertura del lunes, debiéramos presenciar una semana alcista, moviéndonos entre los 9.700 puntos como soporte y los 9.870 puntos como objetivo alcista.