Patinazo en las cuentas de Montoro

La recaudación prevista en los PGE de 2015 era de 184.830 millones de euros, apenas se han ingresado 182.000

Cristóbal Montoro se pasó de optimista. La partida correspondiente a los ingresos impositivos de los Presupuestos Generales (PGE) de 2015 anotaban un montante de 184.830 millones de euros frente a los 182.009 millones que finalmente llegaron a las arcas del Estado. O lo que es lo mismo, los más 2.000 millones de euros que Hacienda dejó de ingresar el pasado año han lastrado dos décimas el cumplimiento del objetivo de déficit, que ha cerrado en el -5,16 por ciento del PIB.

Los casi 3.000 millones de euros menos de recaudación por Impuesto de Sociedades (IS) hna sido lo que más habría pesado en las equívocas cuentas del titular de Hacienda. Frente a los 23.577 millones de euros que se preveía aportasen las empresas a las arcas del fisco, sólo se ingresaron 20.649. Diferencia imputable a los prácticamente nulos efectos de la rebaja fiscal sobre las grandes empresas, que siguen valiéndose de la ingeniería numérica y de las desgravaciones para ahorrase unos cuantos cientos de millones. De hecho, mientras que las pymes aportaron un 15,1 por ciento más -alcanzando los 1.835 millones de euros- por IS, el montante de los grupos empresariales y compañías de más de 250 empleados sólo se elevó un 3,3 por ciento -hasta 16.436 millones de euros-.

Si bien la buena marcha del consumo mejoró en 45 millones de euros la cifra de ingresos por IVA prevista inicialmente por el Gobierno, alcanzándose los 60.305 millones de euros (7,4 por ciento más que en 2014), éstos no han resultado ser suficientes para compensar los más de 800 millones que se dejaron de ingresar en concepto de impuestos especiales. Y es que, pese al incremento de dos décimas con respecto al cierre de 2014, la caída tanto de los precios del petróleo y como la de la electricidad, habría mermado la recaudación hasta los 19.147 millones de euros frente a los 19.894 millones presupuestados.

Por otra parte en el capítulo de otros ingresos también se habría producido una desviación a la baja de 261 millones de euros, habiéndose cerrado el ejercicio con unas entradas por valor de 3.275 millones de euros.

Entre las desviaciones más llamativas que se han producido en las cuentas llama la atención la de 1.167 millones de euros en el capítulo correspondiente a tasas y otros ingresos.

El cantar de la Seguridad Social

Tampoco le han cuadrado las cuentas en lo relativo a la Seguridad Social. Las previsiones de incremento del 3,6 por ciento por cotizaciones sociales se han quedado a menos de la mitad, concretamente en el 1,75 por ciento. Los 4.682 millones de euros que se preveían recaudar de más se han reducido a 2.276. Y ello pese a los 495.000 empleos a tiempo completo que se crearon en 2015.

Como a perro flaco todo son pulgas, si a la precariedad del empleo a la que apunta la recaudación se le añade el suma y sigue de las disposiciones a las que obliga el sistema de pensiones, el resultado es que la Seguridad Social se convierte en la única Administración que ha cerrado el ejercicio con un incremento del negativo en sus cuentas, pasando del -1,04 por ciento de 2014 al -1,26 de 2015.