El salario medio ordinario bruto en los 28 países de la Unión Europea es de 2.000 euros mensuales, por lo que la remuneración española (de 1.639 euros) resulta un 18% más baja.
De esta manera, la brecha entre ambas remuneraciones ha crecido en el último año 2,6 puntos porcentuales. En términos absolutos la diferencia ha pasado de 298 a 361 euros mensuales.
Así lo recoge Adecco en la segunda entrega del ‘VI Monitor Anual Adecco sobre Salarios: España en el contexto europeo’ publicado este jueves, en el que se apunta que el salario medio en la UE ha subido un 3,3% en el último año, muy por encima del 0,2% del alza en España.
Desde Adecco indicaron que “a pesar de la desventaja en comparación con la remuneración media europea, España sigue colocada en una situación intermedia”. Hay 15 países europeos cuyos salarios medios son inferiores al de España (más que duplicando a seis de ellos), mientras que los restantes 12 países tienen remuneraciones mayores que la española.
La situación relativa del salario español es, según la compañía, de “clara ventaja” en comparación con los Países del Este de Europa, pero resulta “desfavorable” con respecto de los países más avanzados de la UE.
Por ejemplo, la remuneración de España es cuatro veces mayor (1.639 y 407 euros al mes, respectivamente) que la de Bulgaria. Sin embargo, es un 39,7% inferior a la alemana, de 2.719 euros (1.080 euros mensuales de diferencia).
Si comparamos el salario español con los vecinos más inmediatos, Francia y Portugal, se observa que la remuneración española supera en un 61% a la del país luso (de 1.017 euros al mes), lo que se traduce en una diferencia de 622 euros mensuales a favor (la brecha entre los dos salarios se ha reducido en 46 euros al mes).
En cambio, la remuneración española es un 30,4% inferior a la francesa (717 euros menos cada mes; ampliándose la diferencia en 104 euros con respeto al año anterior).
“Se ha reducido la diferencia con el salario portugués pero se ha ampliado respecto del francés, debido a que los salarios vecinos han crecido mientras el español permanecía casi igual”, expuso Adecco.