La temporalidad en el empleo afecta fundamentalmente a la población joven. En 2014, esta tasa alcanzó un promedio del 43,4 por ciento en el conjunto de la Unión, muy por encima de la temporalidad del conjunto de asalariados que se sitúa en una media del 14  por ciento.

El país con la mayor tasa de temporalidad entre los jóvenes empleados es Eslovenia con un 72,7 por ciento, figurando a continuación Polonia con un 71,2 por ciento. España ocupa el tercer lugar en el ranking de la UE. La tasa de temporalidad del empleo juvenil ha llegado al 69,1 por ciento en 2014, con un aumento de más de cuatro puntos respecto del año 2013. Portugal se sitúa en un 63 por ciento. Francia y Croacia superan levemente el 57 por ciento, mientras que Suecia e Italia rondan el 56 por ciento. Los Países Bajos registran un 55,5 por ciento, Alemania un 53,4 por ciento y Luxemburgo un 45,4 por ciento.

Diecisiete países de la Unión Europea cuentan con una temporalidad del empleo juvenil por debajo del promedio. Entre ellos destacan Dinamarca (21,3 por ciento) y el Reino Unido (15,2 por ciento), así como Lituania, Letonia y Rumanía con cifras por debajo del 10 por ciento.