España segundo país con mayor déficit, sólo por detrás de Grecia

Eurostat da el visto bueno a las cuentas de Montoro que registran un gasto 5,1 puntos superior a los ingresos

No va más. Eurostat puso ayer el sello de «válido» sobre las cuentas de las Administraciones Públicas españolas en 2015 que registraron un agujero de -54.965 millones de euros, es decir el -5,1% sobre el PIB y ocho décimas por encima de los objetivos marcados en el plan de estabilidad presupuestaria (-4,2%).

Pese a haber reducido el negativo ocho décimas con respecto a 2014, año en el que cerró con un -5,9%, España es el segundo país de la Unión Europea (UE) con mayor porcentaje de déficit, sólo por detrás de Grecia que cerró el año con un negativo de 12.757 millones de euros, lo que en términos relativos significa un -7,2% sobre el PIB.

Del documento de 12 páginas que se han remitido a Bruselas se extrae que las administraciones españolas gastaron el pasado año un 43,3 por ciento del PIB mientras que los ingresos que se obtuvieron fueron de un 38,2 por ciento. Precisamente ésta es una de las debilidades que nos achaca la Unión Europea desde hace tiempo y que se volvía a poner de relevancia en el Semestre Europeo 2016 afeando que «el nivel de imposición indirecta sea uno de los más bajos de la UE». Tanto es así que, según el indicador de déficit por la política en materia de IVA, las arcas del Estado dejaron de ganar un 53,9% por la aplicación de tipos reducidos y superreducidos, 6,7 puntos por encima de la medida del los 28 (47,2%).  Y todo pese a la subida de impuestos que puso en macha el gobierno de Mariano Rajoy en 2012 que se habría saldado «sin incidencia en la recaudación».

Aunque sean odiosas, en la comparativa con los principales competidores del mercado español las cuentas Alemanas cerraron con un superávit del 0,7% (cinco décimas más que en 2014) siendo el porcentaje de ingresos del 44,6% sobre el PIB y el de gastos 43,9%. Francia redujo su déficit cinco décimas con respecto al año anterior, siendo éste del -3,5% (53,2% de ingresos frente al 56,8% de gastos). Ahora bien, en el caso del país galo no está todo dicho, ya que el informe de Eurostat determina dos «observaciones» referidas a la clasificación del Fondo de Garantía de Depósito y a los costes de liquidación por la reestructuración de la deuda que podrían hace mella en el resultado final.

Italia rebajó en cuatro décimas, hasta el -2,6 la barrera del -3,0% que marca la incursión en el procedimiento de déficit excesivo. Por su parte, los ajustes a los que se vio obligado Portugal en 2014 cuando sus cuentas cerraron con un -7,2% de distancia en el porcentaje de ingresos y gastos sobre PIB, han surtido efecto y el país que preside desde hace apenas un mes Marcelo Rebelo de Sousa, logró reducir el agujero en 2,8 puntos, hasta el -4,4%.

Un futuro incierto 

Respecto a los tiempos que se avecinan las previsiones que ha remitido el Gobierno a Bruselas recogen una estimación de incremento del PIB de 43.610 millones de euros, alcanzando la cifra de 1.124.800 millones, algo que no encaja con las previsiones que presentaba el pasado martes el ministro de Economía y Competitividad en funciones, Luis de Guindos, durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados. De Guindos explicó que la economía crecerá este año un 2,7%, en términos absolutos 29.192 millones de euros, siendo el PIB a final de año de 1.110.382 millones de euros.

En relación al déficit éste será de -31.494 millones de euros sobre el PIB, cifra que tampoco cuadra con el -3,6% de revisión al alza en el nuevo cuadro macro que anunciaba el titular de Economía en funciones, si lo hace con el -2,8% inicialmente previsto en la senda presentada el pasado año a Bruselas. El 70% de los casi 31.500 millones que se gasten de más corresponderán a la Administración Central (-22.496 millones), seguida de la Seguridad Social con un negativo de -10.123 millones de euros y las comunidades autónomas con -3.374 millones. Las corporaciones locales volverán a cerrar el año con un positivo de 4.499 millones de euros.