La Casa del Presidente: reuniones de empresa que hacen historia

El exclusivo hotel boutique de Ávila, ubicado en la que fuera residencia de verano de Adolfo Suárez –primer presidente de la democracia española–, ofrece espacios idóneos para acoger reuniones y concentraciones de equipos. Sus impecables instalaciones y su situación privilegiada en el centro de la ciudad, a los pies de la muralla, permiten trabajar de una manera diferente: disfrutando de una amplia gama de servicios pero completamente desconectados del exterior cuando se necesite

La Casa del Presidente es un hotel singular de cinco estrellas que ocupa la que fuera residencia de verano de Adolfo Suárez, primer presidente de la actual democracia, desde los años 70 a los 90. Perteneciente al Grupo Fontecruz y abierto en 2018, el hotel está ubicado en el centro de Ávila –provincia natal de Suárez, natural de la pequeña localidad de Cebreros–, en un edificio protegido cuyo jardín se encuentra franqueado por la muralla de Ávila (declarada Patrimonio de la Humanidad). Su situación privilegiada, su facilidad de acceso, la calidad de sus servicios y sus diferentes espacios –que conservan un ambiente de sobriedad, intimidad e historia– convierten el hotel en destino perfecto para una escapada, pero también en una sede idónea para acoger concentraciones de equipos, kick offs, consejos de administración y otros encuentros de empresas. Los asistentes tendrán a su disposición todo tipo de comodidades y, al mismo tiempo, podrán aislarse por completo del exterior si lo necesitan y centrarse mejor en la materia de la reunión.

REUNIONES DE EMPRESA DIFERENTES

Las diferentes estancias se distribuyen en tres plantas: la inferior es la más fiel a la estructura original de la casa –que fue construida alrededor de 1970 para la familia Suárez sobre una edificación castellana anterior–, caracterizada por la piedra de las paredes y la madera de vigas y contraventanas. Destacan el zaguán que da la bienvenida al huésped, la cocina –decorada con azulejos de cerámica de Talavera– y el que fuera despacho del presidente, hoy recepción, que se ha mantenido prácticamente intacto; entre sus paredes, se cuenta, tuvieron lugar algunas de las reuniones clave de la Transición, como la que sentó las bases de la legalización del Partido Comunista.

También en esta planta se encuentran los salones sociales del La Casa del Presidente, ambientados con sofás tipo Chester y piezas muy especiales entre las que se incluyen obras de arte originales, muebles franceses de principios del XIX y un biombo oriental del año 1600. Se ofrecen una sala para reuniones con capacidad para 15 personas, con vistas a la muralla y acceso directo al amplio jardín que circunda la casa; dos salones adicionales, uno con chimenea, que se pueden utilizar para los descansos o coffee breaks del grupo o para reunirse de manera distendida; un luminoso porche acristalado, ideal para reflexionar, conversar o como lugar de esparcimiento; y, por último, un espacio acondicionado en el jardín para un máximo de 80 personas. El jardín, salpicado de vegetación, puede emplearse para realizar actividades de team building al aire libre. Además, cabe destacar que La Casa del Presidente es el único hotel abulense intramuros que dispone de piscina.

EL PERSONAL DEL HOTEL, PARTE DEL EQUIPO

El hotel estudiará las necesidades de cada compañía y las características de cada encuentro, para adelantarse a cualquier requerimiento: soluciones tecnológicas (wifi en todas las instalaciones, pantalla, proyector y flip-chart, etc.). Además, y teniendo en cuenta la importancia que cobra la gastronomía en los encuentros de empresas, en el restaurante de La Casa del Presidente (especializado en gastronomía regional castellana) se diseñan con flexibilidad diferentes menús de trabajo, finger cocktails más informales y ligeros –pensados para poder trabajar toda la tarde– o incluso bufés, a disfrutar en el interior de la casa o en los jardines.

A la hora de descansar, el hotel ofrece 10 habitaciones exclusivas (dos Delux, cinco Junior Suites y tres Suites) que hacen que el huésped se sienta como un auténtico presidente: todas cuentan con cama king size, bañera, ducha de aromaterapia y amenities de Chopard. Cada una ha sido bautizada en honor a grandes conceptos que, para la propiedad, dirigieron la vida de Adolfo Suárez (como Libertad, Paz, Coraje o Diálogo). Sobresalen las habitaciones con terraza (con vistas al jardín y a la muralla), las abuhardilladas del último piso y las suites (de más de 50 m²). El excepcional ‘desayuno del presidente’ que se incluye en las propuestas de grupos será la mejor forma de arrancar el día: zumos naturales y café recién hecho, mermeladas artesanales, embutidos locales, quesos de la sierra de Gredos y el valle del Tiétar, yogures naturales de vacas abulenses y una gran variedad de panes artesanos de la centenaria Tahona del Sotillo.

CON EL SELLO DEL GRUPO FONTECRUZ

La Casa del Presiente es el proyecto más especial, singular y emotivo del grupo hotelero Fontecruz, con establecimientos en Ávila, Sevilla, Toledo y Lisboa. En los años 90, la familia Ortega, propietaria del grupo, adquirió el inmueble sito en la calle Telares número 1 de Ávila (antigua casa de Adolfo Suárez) para convertirlo en su propio hogar vacacional. En 2018, y tras una reforma llevada a cabo por el arquitecto Gustavo Vázquez y el estudio de interiorismo Ángel Studio y Late Motiv, abrió sus puertas al público con el deseo de que este pueda disfrutar buenos momentos como los vividos en la casa tanto por los Suárez como por los Ortega.