La confianza del consumidor cae tres décimas en mayo

El ICC se sitúa en los 90,7 puntos para el quinto mes del año

El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) cayó tres décimas en mayo, para situarse en los 90,7 puntos, según se desprende de la última información mensual publicada por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).

Según se explica, la caída de la valoración de la situación actual, que ha caído 1,4 puntos este mes, se traduce en el pequeño retroceso del indicador. La tasa interanual muestra, por otro lado, una clara evolución negativa: el descenso es de 12,4 puntos, con pérdidas superiores a las expectativas.

En términos porcentuales, el perfil de la evolución registrada es muy similar: el ICC baja en los últimos doce meses un 13,6% como resultado de un descenso del 10,5% en la valoración de la situación actual y una pérdida del 16,3% en las expectativas.

Expresado en tasas de variación, el ICC respecto al pasado mes de abril pierde un 0,003 en términos absolutos o un 0,29 en porcentaje, mientras que la tasa interanual retrocede un 12% en relación al mismo mes de 2015. Por último, tomando como base enero de 2005, el ICC se encuentra en estos momentos 7,4 puntos por debajo de los valores que se obtuvieron en ese momento, mientras que en mayo del pasado año esa misma diferencia se situaba en 5,2 puntos.

Valoración y expectativas

El índice de valoración de la situación actual se sitúa en mayo en 82,9 puntos, con una pérdida de 1,4 puntos en relación al obtenido el pasado mes de abril. No obstante, este nuevo descenso de la valoración de la situación actual presenta un perfil totalmente diferente al observado en los últimos cuatro meses que ha estado marcado por los descensos en la valoración del empleo y la situación económica junto con los avances en la situación de los hogares, que ha llegado en el pasado abril a alcanzar su valor máximo de los últimos ocho años.

Por otro lado, el índice de expectativas llega en este mes a los 98,6 puntos, un pequeño aumento de 0,8 puntos respecto al dato del pasado abril y el primero en lo que va de año. Este ligero avance es consecuencia de la notable subida de las expectativas en torno a la evolución de la situación económica (+2,2 puntos), mientras que las relativas a la evolución de los hogares crece muy ligeramente (+0,7 puntos) y las que anticipan el futuro del mercado de trabajo se mantienen en negativo y vuelven a retroceder (-0,5 puntos).