La fisioterapia puede prevenir y combatir la diabetes

El Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid (Cpfcm) informó hoy de que la fisioterapia puede tanto prevenir la diabetes como mejorar las funciones músculo-esqueléticas y neurológicas de las personas que tienen esta patología para incrementar su calidad de vida. Por esta razón, la institución colegial ha dedicado el vídeo-consejo del mes de diciembre de la campaña ’12 meses, 12 consejos de salud’ (‘http://youtu.be/jTkmg6ZeZQs’) a los beneficios que la fisioterapia puede aportar a las personas con esta enfermedad.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la diabetes es una enfermedad crónica que aparece cuando el páncreas no produce insulina suficiente (tipo 1) o cuando el organismo no utiliza eficazmente la insulina que produce (tipo 2). La diabetes de tipo 1 se inicia en la infancia o en la juventud, mientras que la de tipo 2, que representa el 90% de los casos mundiales, aparece en la edad adulta y se debe en gran medida al sobrepeso, la inactividad física y un envejecimiento inactivo.

El secretario general del CPFCM, José Santos, informó de que en este último caso los fisioterapeutas pueden contribuir a la prevención de la enfermedad, «ayudando a las personas con diabetes a planificar un programa de ejercicios personalizado a fin de mantener un buen control glucémico y conseguir el peso ideal».

«Está demostrado que la modificación del estilo de vida, que incluye el ejercicio intensivo, es más eficaz a la hora de prevenir la diabetes que el tratamiento farmacológico», aseguró el experto. «Además, la fisioterapia genera mejoras metabólicas incluso ante la ausencia de pérdida de peso, reduciendo la frecuencia de eventos cardiovasculares y mejorando la esperanza de vida».

TRATAMIENTO CON FISIOTERAPIA

Además, este experto asegura que la fisioterapia también tiene mucho que aportar una vez desarrollada la enfermedad, ya que sus complicaciones pueden causar úlceras, hipertensión, vasculopatía diabética o enfermedad cerebrovascular, entre otras afecciones susceptibles de ser tratadas con técnicas fisioterapéuticas.

Según el CPFCM, la mayoría de las personas con diabetes sufren complicaciones musculoesqueléticas, como hombro doloroso, dolor de espalda u osteoartritis. Además, muchas personas con diabetes tipo 1 mal controlada desarrollan un síndrome que limita la movilidad de sus articulaciones.

«En todas estas afecciones, la fisioterapia juega un papel fundamental a la hora de devolver a las personas un nivel normal de salud y bienestar. Esto se consigue a través de una combinación de ejercicios activos y pasivos, así como con la utilización de instrumentos mecánicos y eléctricos», asegura Santos.

Por otra parte, otra de las complicaciones de esta enfermedad es que el paciente, en función de su evolución, puede manifestar varios tipos y grados de pérdida sensorial en los pies y parte de las piernas. Así, puede ver alterado su reflejo miotático, que es uno de los mecanismos de defensa que tiene el cuerpo humano para evitar lesiones, sentir debilidad muscular en las extremidades inferiores, calambres, pinchazos, sensación de nudosidades o arena en las zapatillas, etc.

El Cpfcm informó de que cuando se producen estos síntomas, el fisioterapeuta debe observar la incapacidad que le suponen al paciente a la hora de realizar sus actividades cotidianas y abordarlas a través de distintas técnicas de rehabilitación. Asimismo, el profesional puede ayudar al paciente a proteger el miembro afectado de todo traumatismo (muy vulnerable por su falta de sensibilidad) y mejorar al máximo la circulación de las áreas, evitando edemas y rigideces y previniendo la atrofia.

«Desgraciadamente en los pacientes con diabetes existe una importante incidencia (cuatro veces superior a la población general) de gangrena y la consiguiente amputación de los miembros», aseguró Santos. «Llegado el caso, el fisioterapeuta puede aliviar el dolor del postoperatorio, la limitación de la discapacidad y el uso óptimo de las prótesis».

IMPORTANCIA DEL EJERCICIO FÍSICO

En cualquier caso, para evitar llegar a este punto, el Cpfcm recomienda a las personas con diabetes llevar una dieta equilibrada, con consumo de carbohidratos de descomposición lenta y ricos en fibra, que ayuden a equilibrar los niveles de azúcar, no fumar, mantener un índice de masa muscular adecuado a la edad, controlar el estado del corazón, revisar y cuidar los pies a diario y hacer ejercicio regularmente.

Y es que según una encuesta de autocontrol de la diabetes realizada por Glasgow y cols sobre una población de 2.056 adultos con diabetes en EEUU, la calidad de vida de los participantes era de moderada a baja, debido a multitud de factores, entre los que destacan los reducidos niveles de actividad física realizada.

En este sentido, el secretario general del Cpfcm reiteró que «si se iniciaran programas de actividad física de intensidad moderada con una población de individuos adultos diabéticos, se obtendrían mejores resultados en la calidad de vida en relación con factores médicos, demográficos y de autocontrol de la enfermedad».

En este sentido, recordó que los fisioterapeutas podrían supervisar este ejercicio y proponer actividades específicas para personas con complicaciones causadas por la diabetes, de manera que se evite realizar ciertos movimientos que podrían ir en detrimento de su salud.

 

Fuente: Servimedia