La OCDE no se conforma con las medidas de Draghi

La OCDE llama a la puerta del Banco Central Europeo para hacer peticiones. Reclama a la institución que lleve a cabo más estímulos monetarios que logren reactivar la débil demanda en la Eurozona, así como para expulsar al fantasma de la inflación.

A pesar de las exigencias, es cierto que la OCDE aplaude las pasadas medidas tomadas por el BCE liderado por Mario Draghi, pero insiste en hacer más demandas, entre ellas, insta a la compra de deuda porque arguye que «es necesario». Insiste en que la estructura del sistema bancario de la Eurozona es débil, un hecho que trae como consecuencia que la demanda siga parada.

En este escenario, la OCDE cree que hay que dar un paso más para conseguir la unión bancaria en Europa, tal como estaba en la agenda de los 28 y una evaluación fiable de las entidades bancarias. Ésto último será algo que se hará en noviembre a través de los test de estrés que tendrán que pasar los bancos para saber si las peticiones de Basilea III están siendo cumplidas y tienen un soporte de capital fortalecido.

Advierte de que la baja inflación hace más difícil lograr el relativo ajuste de precios que sigue siendo necesario para reequilibrar la demanda de la Eurozona sin tener que sufrir un periodo prolongado de lento crecimiento y un alto desempleo.

Decepcionada con la recuperación de la Eurozona
La OCDE cree que la recuperación en la zona euro sigue siendo «decepcionante», especialmente en sus principales economías: Alemania, Francia e Italia. Países enfrentados en los últimos tiempos por la petición de los dos últimos de flexibilizar el objetivo de déficit que hay que cumplir y el rechazo del ministro de Finanzas alemán.

Añade que aunque el crecimiento en algunas economías de la periferia de la unión monetaria es alentador, algunos de estos países aún se enfrentan a «significativos estructurales y fiscales», además de a un legado de elevada deuda.

(AGENCIAS)