La oposición atribuye a Camps y Barberá la responsabilidad política de la contratación con el Instituto Nóos

Los grupos de la oposición en las Corts valencianes han atribuido al expresidente de la Generalitat Francisco Camps y a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, la responsabilidad política de la contratación con el Instituto Nóos para la organización del evento Valencia Summit, por cuyas tres ediciones la entidad entonces presidida por Iñaki Urdangarin cobró 3,6 millones de euros públicos, a pesar de que el coste real de las mismas fue de 911.000 euros.

En este sentido, el síndic del PSPV, Antonio Torres, ha expresado su confianza en que ambos dirigentes ‘populares’ se hagan responsables de dichos expedientes y «no dejen con el culo al aire» a directores generales y gerentes de empresas públicas.

Al respecto, ha argumentado que «nadie se puede pensar que el gerente de una empresa pública o de una fundación tuviese competencias suficientes para poder firmar contratos de un volumen importante y promovido por una alta personalidad de la Casa Real a la que normalmente no tiene acceso un director general de ninguna empresa ni fundación».

Así se han pronunciado en declaraciones a los medios en los pasillos de las Corts con motivo de los más de 300 testigos que declararán a lo largo del juicio del caso Nóos, entre quienes se encontrarían el expresidente de la Generalitat Valenciana Francisco Camps, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberà, el vicesecretario de Estudios y Programas del PP, Esteban González Pons, entre otros.

Torres ha apuntado que «es muy sospechoso que las consellerias y empresas públicas troceen contratos» y opina que «hay alguien que coordina esa operación», y ha señalado a Camps y Barberá. Justamente, el síndic de Compromís, Enric Morera, ha dicho que es «incomprensible» que ambos «no estén imputados» y lo ha atribuido a que «la acusación no ha hecho los deberes».

Ante esta afirmación, el portavoz socialista, dado que están personados en la causa, ha defendido que su formación «ha cumplido con creces» en la actuación y denuncia contra los casos de corrupción en la Comunitat Valenciana.

Por otro lado, el diputado de EUPV Ignacio Blanco ha señalado a Camps y Barberá como los responsables políticos de la trama Nóos en la Comunitat Valenciana porque eran quienes «se hacían las fotos, eran los que daban las directrices, ya que el Ayuntamiento y la Generalitat estaban implicados en los negocios de Urdangarin» para «ganar proyección» y «proyectar una imagen falsa de Valencia» de un «Levante feliz».

«EL ESCAÑO HA SERVIDO DE ESCUDO»

A su juicio, «es posible que la imputación –de Camps y Barberá— acabe llegando». De hecho, se ha mostrado convencido de que si no fueran diputados en las Corts «ya estarán imputados», pero «el escaño les ha servido de escudo», ha lamentado.

 

EUROPA PRESS