La posible subida de los tipos de interés y el proteccionismo en EE.UU. alarma a los países emergentes

La evolución de los tipos de interés y las políticas comerciales de Estados Unidos pueden producir un impacto negativo en las economías del mundo, según informa Crédito y Caución.

La comitiva de Trump se encuentra aun eligiendo a los representantes de los distintos órganos políticos de Estados Unidos. Mientras tanto, los mercados emergentes se encuentran en alerta ante cualquier acción del nuevo organismo presidencial de la Casa Blanca. La incertidumbre reina en estos países al ver las perspectivas de 2017.

Según un informe de Crédito y Caución, las nuevas políticas Estados Unidos traerán consigo un mayor número de puntos en contra que a favor. Dos de las promesas de la administración del magnate podrían tener impactos destacados: estímulos fiscales y proteccionismo.

Los tipos de interés en Estados Unidos podrían crecer a un ritmo fuera de lo esperado. Los estímulos fiscales Los estímulos fiscales sugieren un ciclo de moderación de la política monetaria más rápido de lo esperado, lo que causaría fugas de capital y condiciones más estrictas en economías como Turquía, Sudáfrica o Argentina. Un incremento del rendimiento de los bonos en Estados Unidos provocaría que los activos de los mercados emergentes fuesen menos atractivos.

También, esta situación complicaría a los prestatarios de los mercados emergentes para refinanciar su deuda. La nueva directriz de subida de tipos por la Fed podría aumentar el riesgo para los emergentes más expuestos a los flujos internacionales de capital con una alta carga de endeudamiento en moneda extranjera. Turquía es el país más expuesto, Rusia, India y Tailandia son menos vulnerables, pero también pueden ser afectados.

Por otro lado, estos mercados emergentes también pueden ser sacudidos por las políticas comerciales llevadas a cabo por la nueva dirección del  presidente electo. Los nuevos planes de Trump para la inversión en infraestructuras a gran escala podrían ser beneficiosos para los países que exportan hierro o a acero, pero a corto plazo, las medidas proteccionistas poco ortodoxas acabarían afectando la demanda de las importaciones Estados Unidos.

Un mayor proteccionismo tendría efectos cada vez más negativos para los socios comerciales de Estados Unidos. México y China en concreto ya han sido señalados como posible objetivo de aranceles. En general, los países que más exportan a Estados Unidos, como México y Canadá, serían los más afectados.