Las salidas netas de capital en España se situaron en 6.000 millones de euros en el primer semestre del año, frente a unas entradas por valor de 43.300 millones del mismo periodo del ejercicio anterior.
Así consta en la balanza de pagos correspondiente a junio publicada este viernes por el Banco de España que apunta que la economía española experimentó en los seis primeros meses una necesidad de financiación de 5.900 millones de euros, frente a una capacidad de financiación acumulada en igual período del año previo de 2.900 millones.

La cuenta financiera de todos los sectores, excluido el Banco de España, acumuló en los seis primeros meses del año unas salidas netas de capital por valor de los citados 6.000 millones.

Junto a ello, los activos netos del Banco de España frente al exterior aumentaron en la primera mitad del año en 3.000 millones de euros, fundamentalmente por el incremento de los activos netos del Banco de España frente al Eurosistema.

Así, las salidas netas de la cuenta financiera, excluido el Banco de España, se materializaron a través de la inversión directa y la otra inversión, mientras que se contabilizaron entradas netas en otra inversión y en instrumentos financieros derivados.

De este modo, las inversiones directas originaron salidas netas de 5.300 millones de euros. Las inversiones directas de España en el exterior dieron lugar a salidas de fondos por valor de 11.800 millones, que fueron superiores a las entradas registradas en concepto de inversiones directas del exterior en España, por un importe de 6.500 millones. Las inversiones de cartera generaron en este período entradas netas por valor de 5.300 millones.

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