Los turistas asiáticos y norteamericanos comprarán un 15% más este año

Los chinos incrementaron su gasto un 84 por ciento en 2015

Hay que remontarse a los años 60 para comenzar a hablar de turismo en España, cuando las suecas en nuestras playas llenaban los contenidos informativos. Fue el inicio del paquete ‘sol y playa’ que se ha extendido y mantenido hasta la actualidad. No cabe duda que ello ha sido y es una importante fuente de ingresos para las arcas pero es tiempo de cambiar el chip y seguir el popular refrán de ‘renovarse o morir’.

Es riqueza, sí, pero España posee más recursos para explotar.  Los comportamientos de unas nacionalidades y otras distan entre sí. Mientras los europeos buscan torrarse al sol, los extracomunitarios disfrutan visitando tiendas y ‘quemando’ sus tarjetas de crédito. Es el turista extracomunitario, el que viene de compras y que en 2015 se dejó alrededor de 2.000 millones de euros. Una cifra elevada y que crecerá un 15 por ciento en 2016, según el estudio Posicionamiento de España como turismo de compras elaborado por Global Blue.

“Tenemos los mimbres para para hacer cesto, pero no hacemos cesto”, explicó el Country Manager de Global Blue, Luis Llorca, refiriéndose al enorme potencial que tiene España para atraer a ese turista de compras, ese que “nos deja mucho dinero para generar riqueza”. Y es que estos visitantes, principalmente asiáticos y norteamericanos, gastan en un día lo que los europeos en una semana. Los datos lo demuestran porque el uno por ciento de las transacciones supone el 23 por ciento de las compras. Primero fueron los rusos, y ahora son los chinos, cuyo gasto se incrementó un 84 por ciento, alcanzando el 35 por ciento del total que dejan los turistas en nuestro país.

Hablamos de un turismo cuyas ventas tax free (aquellas en las que se devuelve el IVA a la salida de las fronteras), protagonizaron un aumento del 39 por ciento.

Turismo de alto nivel

Sin embargo, el débil posicionamiento no deja brillar al diamante en bruto que es España. “Cuando hablamos de turista chino hablamos de dinero”, explica Llorca. Es un turista de alto poder adquisitivo que “cuando viaja gasta” y prueba de ello es que triplicaron su desembolso en sólo una década, pasando de gastar 100 euros en 2006 a 5.000 euros, de ahí la necesidad de atraerlos. Y todo apunta a que, a pesar de la desaceleración de su economía, seguirá creciendo el gasto. Según Global Blue, lo hará a un ritmo del 20 por ciento.

Bien es cierto que España se está tomando al pie de la letra eso de ‘renovarse o morir’ pero, aunque pone todo de su mano para atraer a más turistas de lujo, todavía “queda mucho por hacer”. Es necesario adaptarse a sus necesidades, incrementar las conexiones aéreas directas con dichos países – que ya se está haciendo –, ofrecer una mayor oferta de hoteles de lujo y diseñar paquetes destinados exclusivamente a ellos para que gasten a gusto.

Atraerlos es sin duda alguna una forma de generar riqueza, y cada vez son más los visitantes asiáticos y norteamericanos que viajan a España, llegando a representar el Top10. Concretamente, a cierre del pasado año la llegada de turistas chinos se incrementó un 159 por ciento, pero continúan siendo pocos, apenas seis décimas de la totalidad y un dos por ciento los estadounidenses, cifras muy por debajo de los procedentes de países europeos, como los británicos (15 por ciento). Estos últimos son muchos más, pero su cuota de gasto es muy baja porque vienen en busca del paquete ‘sol y playa’.