El Ibex 35 finalizo la semana alejándose de sus primeros niveles de soporte situados en los 10.450 puntos. Tras apoyarse en dos ocasiones en las últimas sesiones en dicha zona, tres jornadas alcistas durante esta semana han devuelto a selectivo español a cotas cercanas a los 10.700 puntos. Las palabras de Yellen, afirmando que de continuar con las buenas perspectivas de inflación, unido al inicio de la temporada de resultados empresariales han despertado a un mercado que estaba huérfanos de catalizadores.
A pesar de los mínimos anuales en el mercado del petróleo, las compañías relacionadas con las materias primas han sido las que mejor comportamiento han tenido. Arcelormittal, con una revalorización superior al 6% y Repsol con un 3% han sido los valores que han liderado las subidas en el selectivo español. La banca continua consolidando niveles a la espera de los resultados del pasado trimestre que podrían justificar su buen comportamiento anual, que tiene una rentabilidad anual media cercana al 20%.
El Ibex 35 tuvo un comportamiento similar al resto de sus homólogos europeos, ya que la ausencia de grandes referencias económicas no está permitiendo grandes divergencias entre ellos. Los índices americanos también consolidaron una subida en torno al 1%, manteniéndose firmes en el entorno de máximos históricos. La temporada de resultados y la progresiva depreciación del dólar podría devolver el apetito por el riesgo a un mercado que parece anestesiado.
La próxima semana estará marcada por la presentación de datos macro de máxima relevancia y por la decisión de tipos de interés del Banco Central Europeo. A pesar que no esperamos grandes novedades en relación a la política monetaria europea, un mensaje laxo por parte de Mario Draghi podría apaciguar las ansias de los inversores que no cesan en su especulación a cerca del fin de los estímulos europeos.
Para la semana que viene esperamos que el Ibex 35 continúe cotizando dentro del rango comprendido entre los 10.450 puntos y los 10.800 puntos. En el caso que se produzca un fuerte repunto de la macroeconomía podríamos ver una ruptura de su primera resistencia, buscando de nuevo los 11.000 puntos, mientras que una decepción en la macroeconomía, en los primeros resultados empresariales o la irrupción de un conflicto geopolítico podría reactivar de nuevo las ventas hacia niveles cercanos a los 10.400 puntos.