La empresa que quiera optar a este contrato, según recoge Servimedia, deberá aportar 25 vehículos de colores oscuros metalizados por fuera y de tapizado oscuro en su interior. Se trata de cinco tipos distintos de vehículos, si bien se agrupan en 12 berlinas de motor híbrido y 11 berlinas diésel, así como dos monovolúmenes de 9 plazas, uno de ellos adaptado para el traslado de personas con discapacidad que requieran la utilización de sillas de ruedas.

Además, según los detalles del contrato que quiere la Cámara Baja, los vehículos tienen que estar equipados con sistema de navegación, climatizador automático de cuatro zonas e instalación manos libres 'bluetooth' para teléfono móvil. El Congreso, que requiere que los coches tengan seguro a todo riesgo, carga a cuenta de la compañía que presta los vehículos su mantenimiento integral, así como el coste de todas las operaciones de mantenimiento, reparación o sustitución que requiera el coche, salvo la limpieza interior y exterior y el combustible.

La Cámara Baja se compromete a tener vigilado el funcionamiento del vehículo y a asumir las sanciones que deriven de la conducción del automóvil, ya que las que deriven del estado del mismo correrán por cuenta del adjudicatario. En el contrato, el Congreso se reserva la posibilidad de instalar en los vehículos el equipamiento electrónico (inhibidores) que estime oportuno. El contrato se extinguirá el 31 de diciembre de 2017, aunque podrá prorrogarse un máximo de dos años más, periodo durante el cual deberá continuar el suministro de los coches hasta que haya un nuevo contrato.