“El agua será uno de los argumentos de inversión del siglo XXI”

El director de marketing y de comunicación de Fidelity en España señala que del problema de la escasez del agua surge una auténtica oportunidad de inversión. El 97% del agua que tenemos en el planeta es salada, y del porcentaje restante apto para ser consumido buena parte se encuentra en glaciares y acuíferos subterráneos de difícil acceso. Ahí aparecen en escena numerosas compañías en todo el mundo dedicadas a este tipo de actividad y que, dado el carácter limitado que posee este elemento indispensable para la supervivencia del ser humano, cobran una gran importancia en un momento en el que los niveles de contaminación y el mal uso de los recursos naturales pone en riesgo el correcto abastecimiento del agua.

A estos factores medioambientales se unen con fuerza otros de carácter demográfico. Dos tercios de la superficie del planeta Tierra están cubiertos de agua, pero ésta está desigualmente distribuida por todo el territorio. De hecho, algunos de los países con mayor proyección económica, como la India, sufren especialmente la falta de abastecimiento en este escenario de constante aumento de población. Antonio Salido indica que en ese país asiático se concentra el 17% de la población mundial, mientras solo cuenta con el 4% de las reservas de agua de todo el globo. Un problema que encuentra su solución en la construcción de infraestructuras para la obtención de agua potable a partir de ríos como el Ganges o el Indo. No en vano, la India es el país líder en extracción de agua apta para el consumo. Otra opción, como destaca Salido, es el transporte de agua de otras zonas del planeta en las que se da el fenómeno contrario -baja densidad demográfica con gran concentración de reservas acuáticas-, como es el caso de Canadá o Groenlandia, aunque el coste de este traslado es notable.

No es un problema éste exclusivo de los países emergentes. Los datos de la UNESCO muestran que los países con economías desarrolladas consumen una cantidad de agua diez veces superior a la media de aquellos en vías de expansión. Esta problemática se está agudizando a medida que las poblaciones de estos países también van constantemente en aumento y cobra mayor dificultad su abastecimiento.

Frente a estas dificultades se presentan cada vez más diversas alternativas. El director de marketing y comunicación de Fidelity destaca los proyectos de desalación de agua marina, los cuales considera una buena opción teniendo en cuenta que “más de la mitad de la población mundial vive a una distancia inferior a 60 kilómetros de la costa”. La tecnología ha permitido que los costes de este proceso hayan caído notablemente en las últimas décadas, haciéndolos mucho más factibles. A su entender, la industria del agua ha tenido un crecimiento exponencial recientemente en países áridos de Oriente Próximo, como Israel. En estos casos, el desarrollo va de la mano de la tecnología y la generación de infraestructuras, lo que da pie a “una oportunidad interesante de inversión”. Entre las empresas más atractivas de este sector, Salido destaca a la rusa RusHydro, la surcoreana Doosan, o la india Jain Irrigation Systems. Compañías todas ellas punteras en distintos tratamientos y usos del agua y que presentan importantes oportunidades de crecimiento.