Esto significa, además, una disminución de 2'8 puntos porcentuales respecto al mismo periodo hace un año en una tasa de ahorro que vuelve a ser positiva después de tocar las tasas negativas en el primer trimestre, cuando retrocedieron un 0'6%.

Además, la renta disponible de los hogares disminuyó en un 3,2% en cuanto a la tasa interanual, alcanzando prácticamente los 172.961 millones de euros durante el segundo trimestre. Un resultado que tiene explicación en la disminución de saldo de rentas primarias, debido tanto al descenso del excedente de explotación como a la renta mixta de los hogares. Así como a la disminución de la remuneración de los asalariados y del saldo neto de rentas de la propiedad percibidas.

En lo que se refiere a la distribución secundaria de la renta, no compensan el aumento de los impuestos sobre la renta y el patrimonio y la disminución de las transferencias corrientes percibidas.

En definitiva, el gasto en consumo final de los hogares entre abril y junio subió un 0,1%, lo que hace que el ahorro alcance los 20.800 millones de euros.