España tendrá hasta 1.900 millones de euros para aliviar el problema del paro juvenil pero la ayuda no es gratis. El Gobierno deberá presentar antes de octubre un plan en el que se detalle en qué se va a gastar el dinero y Europa quiere vigilar de cerca. Según ha explicado el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, la intención es que se pueda empezar a actuar a principios del año que viene. "Los nuevos equipos serán enviados para ayudar a los países a preparar los proyectos de empleo juvenil y aplicar el sistema de garantías juvenil", ha dicho.

En el Parlamento europeo, Barroso ha celebrado que el Consejo decidiera adelantar la puesta en marcha de ese fondo contra el paro juvenil y ha recordado que la situación actual es "economicamente insostenible y socialmente inaceptable". También ha habido tiempo para anuncios: el portugués ha adelantado que se ha creado un grupo de sabios para estudiar la viabilidad de los eurobonos. De momento es sólo un primer paso porque ese comité tiene un plazo de 3 años para presentar un informe al Parlamento y al Consejo en el que evalúe los requerimientos legales y las consecuencias de esta medida.