Un hecho que ya se conoce en La Moncloa, ya que el Gobierno ha recibido a través de un escrito la petición formal de explicaciones sobre el por qué de este incremento de las tasas. Un primer paso dado desde Bruselas que tiene como objetivo examinar si están justificados los nuevos costes y que responde a denuncias de compañías de diferentes partes del sector, desde la aviación hasta las asociaciones y agencias de viajes, que señalan que la subida no respeta las normas de la Unión.

Desde ahora, el Gobierno contará con un plazo de hasta dos meses para responder a preguntas del Ejecutivo comunitario y en caso de no ser aceptadas, se podrían llevar a cabo cambios en las tasas e incluso llevar el caso ante el Tribunal de Justicia de Luxemburgo.

Los cambios han supuesto incrementos en el precio de los servicios de aeropuertos. En Madrid y Barcelona, por ejemplo, las tasas por pasajero hasta se han duplicado, algo que notan en mayor parte las compañías que operan en los dos aeropuertos mencionados y que, dicen desde Bruselas, podrían marcharse de alguno de estos.