Cambiamos de nuevo la hora

El “Cambio de Hora” comenzó a generalizarse, aunque de manera desigual, a partir de 1974, cuando se produjo la primera crisis del petróleo y algunos países decidieron adelantar sus relojes para poder aprovechar mejor la luz del sol y consumir así menos electricidad. Se aplica como directiva desde 1981 y según los organismos reguladores ésto nos permite ahorrar un 5% de energía, o lo que es lo mismo, unos 300 millones de euros.

De esa cantidad, los hogares ahorran unos 90 millones y el resto, lo hacen las empresas y la industria. No obstante y a pesar de este ahorro, el Ministerio recomienda hábitos de menor conusmo energético.

Consejos que pasan por aprovechar la luz natural, por utilizar bombillas de bajo consumo o fluorescentes, por limpiar las fuentes de luz o por el simple gesto de apagar el interruptor cuando nos vamos de casa.