Eslovenia descarta ser el próximo Chipre: «Podemos sanear nuestro sector bancario sin Bruselas»

Chipre se sumaba el mes pasado a la lista de países europeos que no han podido afrontar sus pagos en algún momento por sí solos, sin recurrir a ayuda financiera externa. Firmado el rescate para el pequeño país mediterráneo, la mirada de los expertos apunta ahora a Eslovenia. Según algunos estudios, los bancos del ex-territorio yugoslavo tendrían que hacer frente próximamente a unos 6.000 o 7.000 millones de euros en préstamos dudosos. Esa cifra, tal y como confirma Aljaž Gosnar, embajador esloveno en Madrid, alcanzaría un 14% de su Producto Interior Bruto.

Dada la magnitud de ese importe, mucho se viene especulando en el mercado con la posibilidad de que al Estado esloveno no le quede otra que pedir ayuda financiera a la UE y el FMI, como ya han hecho los Grecia, Portugal, Irlanda o Chipre. Una opinión, cada vez más extendida, que choca de frente con el optimismo de las autoridades de este país y con las propias previsiones de la Comisión Europea o la OCDE, que en las últimas fechas han otorgado legitimidad a los cálculos del Gobierno esloveno. “Tenemos confianza, creemos que podremos realizar el saneamiento del sector bancario solos”, indica Gosnar, añadiendo que la rápida aplicación de nuevas medidas será clave para conseguir el éxito en esta ardua tarea.

Entre esas inminentes reformas, el embajador esloveno en nuestro país adelanta una de calado: la privatización de bienes estatales. “En Eslovenia tenemos un nivel de propiedad pública por encima del promedio europeo. Pronto podríamos ver privatizaciones de algunos de estos bienes”. Con ello, el Ejecutivo del país centroeuropeo trataría de frenar la escalada de su coste de financiación, disminuir la tasa de desempleo -actualmente en el 13%, su nivel más alto desde 1999- y poner freno a la caída de su PIB, que en 2103 se contrajo un 2,3%.