Esperanza se va, e Ignacio González no gusta

Jesús Terciado, presidente de CEPYME, respeta la decisión de Esperanza Aguirre y subraya que es y ha sido una persona “muy querida por los empresarios de Madrid y de toda España”. “Todos lamentamos su marcha”, insiste, al recordar que han sido muchas las colaboraciones con las organizaciones empresariales. Destaca de la hasta ahora presidenta la transparencia en sus palabras y cree que ha sido pionera en medidas liberalizadoras, en romper trabas administrativas en pro de la empresa, en reducir impuestos y eso, dice, “se ha notado en la Comunidad de Madrid, cuyo crecimiento ha sido superior que el resto de España”.  Espera que Ignacio González, siga manteniendo la estrecha relación con la empresa, como su antecesora. “Esperemos que dé la libertad suficiente al empresario para que pueda seguir creando empleo en la Comunidad”, ha concluido.

Fernando Jáuregui, director de diariocritico.com, cree que Esperanza Aguirre ha dicho la verdad, ya que “nunca ha tenido pelos en la lengua”. Con 30 años en política, cree que ha cumplido con sus objetivos, salvo el de llegar a la presidencia del Gobierno. Para Jáuregui la presión familiar ha sido la principal causa de la dimisión. “Es lógico que tire la toalla, contando además con que se siente sola en política nacional”, aclara.

Cree que en el encuentro entre Esperanza Aguirre y Mariano Rajoy, la hasta ahora presidenta de la Comunidad, ha dejado entronizado al frente de la región de Madrid a Ignacio González hasta las próximas elecciones de 2015. Jaúregui destaca el poco cariño que recibe González: “No es bien valorado en Génova, no le quieren, incluso entre la militancia de Madrid tampoco hay unanimidad en torno a su figura”, a la que considera antipática. Cree que el sucesor en el cargo, cometió el error de enfrentarse a Rajoy de manera frontal en el Congreso de 2008, por lo que considera que a día de hoy sigue siendo el principal enemigo del presidente del Gobierno. “A la sesión de investidura irá solo él”.

Antonio Papell, analista político y asesor del Grupo Vocento, considera que la marcha de Aguirre se debe a un “cansancio infinito hacia la figura de Rajoy que está escasamente perfilada, es inconcreta y vaporosa”. Cree que a Mariano Rajoy “se le está yendo el Partido Popular de las manos por voluntad” porque nunca ha querido confraternizar con aquellos que “podrían hacerle sombra” dentro de su formación política. Cree que al hacer recuento hoy día, la mayoría de militantes de la etapa de Aznar, “están en la reserva, retirados o conspirando”.

En la cadena sucesoria destaca la figura de Lucía Figar, actual consejera de Educación y Empleo de la Comunidad de Madrid. Respecto a Ignacio González, destaca que “ ha sido un buen numero dos, pero será un débil número uno”. “Se notará mucho la diferencia”, concluye.

Tomás Calleja, director de Programas Alfa Dirección de la Universidad de Nebrija, destaca el discurso de Esperanza Aguirre: “Habla de abandonar la política y no de dejarla”, subraya Calleja quien asegura que el sistema político español tiene tendencia a expulsar a los mejores y conservar a los menos buenos. A su juicio Esperanza era una de las mejores, ya que ha sido clara en sus mensajes y ha hecho oposición dentro de su propio partido: “se ha metido con el Estado, con el sistema de Gobierno y con los gasto de la Administración”. En este punto,  ha ejemplificado con Alberto Ruiz Gallardón, quien a su juicio “ le han tenido que dar un ministerio para que deje de arruinar al Estado”.

En política española no hay sucesión, hay relevo”, aclara, y denuncia que “nadie va a pensar en los ciudadanos ni en los resultados de aplicar ciertos impuestos”.  Calleja denuncia que ningún político está pensando en el sistema productivo de nuestro país. “Tenemos el sistema político más caro y nadie se ocupa de eso, sólo se preocupan de la gestión tocando los impuestos”. Cree que la política actual nos va a llevar a una situación económica “insuperable”.

José Barta, presidente de Baral Internacional, cree que la decisión de abandonar la política tomada este lunes por Esperanza Aguirre tiene “bastante de emocional”, ya que cree que la enfermedad y la familia juegan papeles “importantes” en este paso.  No descarta que vuelva a política en unos años, aunque Barta cree que Aguirre “ha tenido que luchar con su propia imagen dentro del partido”

Para Barta también es importante tener en cuenta la economía real, la productiva. “Estamos en la quinta parte de la producción de lo que se desarrolló en 2007”, por lo que cree que la economía en este país sigue cayendo.  En este contexto, considera que los políticos “no están representados”.

Alfonso Piñeiro, como periodista ha valorado la decisión de Esperanza Aguirre, recordando que “siendo como es, un animal político, pocas personas creen que dé puntada sin hilo”. Quiere aclarar las condiciones objetivas que le han llevado a abandonar la política. Cree que Esperanza Aguirre ha jugado un papel de “mujer en política” y su final puede ser “el cierre de una etapa”.  Respecto a la situación actual cree que “la falta de líderes políticos es consecuencia de la falta de respuestas sociales y viceversa”.