La Comisión Europea estudia ya la posibilidad de crear una especie de corralito en Grecia, en caso de que las cosas se pongan feas. Se trataría de evitar una salida masiva de capitales, en caso de que haya un abandono del euro por parte del país heleno. Se limitaría la retirada de efectivo en los cajeros y se podría llegar a suspender la libre circulación de personas. Estos planes han sido desvelados por la agencia  Reuters, pero desde la Comisión Europea han negado conocerlos.

Las elecciones del próximo 17 de junio en Grecia se han planteado como un referéndum sobre la continuidad del país en la eurozona, pese a que los dos partidos favoritos defienden la permanencia en la moneda única.