Faconauto reclama al Gobierno un Plan Pive 2

Desde la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción lo tienen claro: el sector del motor necesita un Plan PIVE 2. Así lo ha asegurado el presidente de FACONAUTO, Jaume Roura, quien asegura que los fondos de este plan inicial ya se están agotando.  “El Plan PIVE no deja de estar destinado a que el consumidor final que tiene un vehículo de 12 años y no sabe que hacer, ya que le da la posibilidad de sacar 2.000 euros por la chatarra”. Además, asegura que se trata de una iniciativa buena para todos, incluso para las arcas del Gobierno: “de cada euro que invierte en este plan, recupera 3. Y es que en el fondo los concesionarios somos grandes recaudadores de impuestos que le tramitamos la gestión al Gobierno”, argumenta Roura.

Sin embargo, lo cierto es que el primer Plan PIVE no ha evitado que 2012 cierre con un descenso del 13% en las ventas de vehículos, hasta quedarse en menos de las 700.000 unidades. Una disminución con la que, desde FACONAUTO, esperan que se haya tocado suelo: “si esto sigue cayendo, lo único que se va a conseguir es incrementar el paro”, asegura su presidente. Pero Roura va un paso más allá: “todo lo que no sea superar el millón de unidades vendidas en nuestro país, es negativo”. Eso sí, reconoce que la situación actual hace que el consumidor tenga otras preocupaciones, “como sacar la familia adelante”, lo que dificulta la venta del sector.

Sobre el objetivo de las 17 plantas españolas de recuperar los 3 millones de coches producidos para 2016, Jaume Roura cree que “es ambicioso pero no imposible”. Sobre todo centra sus esperanzas en el mercado exterior que, dice, ya se está recuperando. "Otra cosa es el mercado interior, que sigue castigado por la tasa de paro", recuerda. No obstante defiende hay que mirar con buenos ojos al futuro: "si perdemos el optimismo en este país, lo habremos perdido todo", resume.

El presidente de esta patronal también ha reconocido es que el futuro próximo de sector no pasa por el coche eléctrico. Y es que aunque cree que es muy importante, “mientras no se solucionen elementos como la autonomía o la forma de carga va para largo”. Por ello, defiende primero afrontar las necesidades actuales y dejar estas nuevas tecnologías para dentro de 10 o incluso 20 años.

Una unión necesaria del sector

Por el contrario, por lo que sí que ha apostado ha sido por hacer una unidad total del sector de todas las asociaciones representativas: “teniendo una sola voz en el Gobierno es la mejor manera para que se nos escuche”. En este punto, Roura ha recordado las discrepancias que hace un par de años se abrieron entre concesionarios y fabricantes por la Ley de Distribución. Así explica que se confundió el objetivo primordial de la ley: “no se querían devolver coches sino comprar los vehículos que el concesionario cree que se necesita; y tampoco nadie quería indemnizaciones millonarias en caso de cierre de concesiones”.

No obstante, desde FACONAUTO han lanzado una mano al resto del sector y ha destacado que lo importante es “que los fabricantes fabriquen y nosotros podamos vender. Para ello reclama una unión que permita lograr una estabilidad en el sector y en la sociedad española. Y es que ha remarcado que se trata de un sector que aporta un 6% a nuestro PIB. “De hecho, el sector se ha puesto como motor de nuestra economía, junto con el turismo”, ha concluido.