El cohete Unha-3, no ha logrado su objetivo de poner en órbita un satélite artificial y expertos investigan la causa del fracaso de este lanzamiento, cuyo lanzamiento estaba previsto para cualquier momento entre la mañana del jueves y el próximo lunes. Finalmente ha sido minutos después de las 7.30 hora local, y el régimen norcoreano, que había habilitado un centro para invitados y periodistas, no ha informado acerca del lanzamiento.

Los ministros de Asuntos Exteriores del Grupo del G8 han condenado  el lanzamiento mediante un texto y han pedido una "respuesta apropiada" de la ONU, instando a Corea del Norte a abstenerse de este tipo de acciones, que rompen con la paz y estabilidad de la región. La declaración urge también a Corea del Norte a renunciar a sus armas nucleares y a sus actuales programas nucleares y balísticos y a poner fin a sus actividades de enriquecimiento de uranio.

Por su parte, Corea del Sur ha considerado el lanzamiento. una provocación