El Gobierno tantea pedir mayores provisiones para 'ladrillo sano'

El Gobierno ha decidido dar otra dura vuelta de tuerca a las provisiones inmobiliarias. El equipo de Mariano Rajoy pretende poner fin a las dudas del mercado, Bruselas y el FMI sobre el sector bancario español. Y para ello está dispuesto a que las entidades suban nuevamente sus provisiones, tres meses después de haber aprobado unas dotaciones para sanear sus activos inmobiliarios por 53.000 millones. Esas nuevas exigencias van a afectar directamente al crédito sano inmobiliario.

De confirmarse estas nuevas exigencias, tendrán que poner entre 20.000 y 40.000 milones de euros más, para tener un colchón de cerda de 75.000 millones. Algo que no ha gustado al sector financiero, que ya asegura que el poco crédito que hay quedará cortado de raíz.

Tendremos que ver también si hay más dinero público para alguna otra entidad, como pueda ser Novacaixagalicia, y si se crean o no los vehículos de inversión inmobiliaria que quiere crear el Ejecutivo. Algo que, para la socialista Soraya Rodríguez, equivale a crear un banco malo.

 

En cualquier  caso, el principal problema del sector es el crédito al sector inmobiliario. Según el Banco de España, ahora mismo los bancos tienen en cartera unos 184.000 millones de euros en activos inmobiliarios potencialmente problemáticos.