Según De Guindos, la reforma "logrará consolidar un sistema financiero" más eficiente, más saneado y con entidades más solventes". De Guindos ha reiterado que, su principal preocupación, es la de proteger a los ciudadanos. Por un lado, con la inclusión de nuevas exigencias en la comercialización de productos financieros complejos que eviten casos como el de las participaciones preferentes. Pero, sobre todo, por el principio que -según el ministro- ha guiado esta regulación: el de reducir al máximo el coste que tengan que asumir los contribuyentes.

"A este respecto , el único elemento novedoso del Real Decreto estriba en la capacidad del FROB para imponer un ejercicio de asunción de pérdidas más severo par accionistas y acreedores privados que el presentado por la entidad si considera que éste no es suficiente", ha explicado de Guindos.

El ministro también ha confirmado que será a finales de septiembre cuando se conozca, entidad por entidad, qué necesidades de capital tiene cada una. Además, ha avanzado que las entidades intervenidas por el FROB recibirán la ayuda en noviembre, una vez se aprueben sus programas de reestructuración, y que el banco malo estará listo en el mes de diciembre.

EL PSOE, EN CONTRA

El portavoz económico del Partido Socialista en el Congreso, Valeriano Gómez, ha denunciado que -a un ritmo de una reforma cada dos meses- el Gobierno ha llevado a gran parte del sistema financiero a estar al borde de la quiebra. Según Gómez, la petición del rescate para la banca es producto de los errores cometidos en las dos reformas anteriores. "El préstamo total para recapitalizar el sistema financiero da para pagar , durante 2 años y medio, la educación de los millones de niños y jóvenes de cualquier edad. El rescate valo lo mismo que todo lo que España ha gastado en prestación por desempleo desde que comenzó la crisis", ha afirmado el ex ministro.