El que fuera presidente del Tribunal Constitucional y actual catedrático de Derecho Constitucional, Manuel Jiménez de Parga, ha definido a nuestro sistema judicial de “inaceptable por la lentitud con la que opera”. Concretamente, se ha referido al Consejo General del Poder Judicial, del que ha dicho que es una fuente de problemas y que “últimamente está produciendo más males que bienes”. 

Pero este no es el único problema que ve en el sistema. Este catedrático también ha señalado que, “con la justicia actual, la corrupción está en cierto modo protegida”. Así, explica que no se dictan soluciones claras y determinantes que esclarezcan lo que está ocurriendo en el sistema político actual.  Por todo ello, ha apostado por revisar el sistema para conseguir jueces independientes y una administración de la justicia rápida y actual.

Otro asunto que, según el expresidente del Tribunal Constitucional se debe reformar es la ley electoral: “la actual permite la transformación de los partidos políticos en partidos de empleados, en el sentido de personas sometidas a una directiva establecida por la cúpula del partido”. Con este funcionamiento, a juicio de Jiménez de Parga, la relación entre representantes y representados se altera y se estropea. “Hay que buscar una ley electoral en la que los diputados y senadores elegidos sean auténticamente representantes de la gente que los eligió y que no sean representantes de los partidos”, ha añadido al respecto.

Cambios en la educación

Junto con la justicia y la ley electoral, Manuel Jiménez de Parga cree necesario tocar el sistema educativo ya que, dice, “sigue teniendo prácticas de la etapa del franquismo”. En este sentido se ha referido a que se siguen proponiendo como grandes figuras a imitar a personajes destacados que han obtenido mucho dinero de forma incorrecta o a personas que, durante el periodo de Francisco Franco, tuvieron “conductas impresentables”, como Manuel Fraga. “Es una manera de orientar a la juventud de manera equivocada”, ha concluido.