De Kirchner manda al paredón a YPF

El gobierno argentino ha enviado al Congreso un proyecto de ley para hacerse con el 50,01% de YPF, la filial de la española Repsol. Solo falta un paso para poner en manos de Cristinia Fernández de Kirchner la nacionalización de YPF, el Tribunal de Tasación tiene que ver la cuantía que se va a pagar por las acciones. Aun así, tiene que pasar esta propuesta por el Senado y el Congreso, aunque las esperanzas de que la propuesta sea rechazada son escasas, pues el gobierno de Kirchner tiene la mayoría en las cámaras parlamentarias.

¿Qué pasa si se hacen con YPF?

Si se consuma la nacionalización de YPF, por considerarla de interés público, Argentina se quedaría con el 26% de YPF que está en manos de la familia Eskenazi, mientras que Repsol perderá alrededor de un 24%, reduciendo la participación de la española a alrededor del 33% del capital, por lo que perdería por completo el contro de la filial en el país latinoamericano.

No han frenado al gobierno de Argentina las palabras del ministro de Industria, José Manuel Soria de que "los gestos de hostilidad a empresas españolas son gestos de hostilidad a España". Tampoco la presencia del Antonio Brufau, presidente de Repsol en el país que se ha reunido con el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido han surtido demasiado efecto y las diferencias no han sido resueltas.

La retirada de licencias de explotación por parte de las regiones argentinas habían ascendido ya a siete, después de la retirada de la provincia de Santa Cruz en el día de ayer. Poco más de las 19,30 horas de la tarde, la presidenta de Argentina ha suspendido la reunión que tenía con la asociación de provincias, Ofephi alegando que entre los puntos del día no estaba el tema de licencias de Repsol YPF. Las provincias tienen la esperanza de poder participar en un trozo del pastel, si finalmente la filial de la petrolera española consigue ser nacionalizada por el Gobierno de Kirchner.