Muestras de pelo y sangre de las víctimas del ataque del pasado 21 de agosto en la periferia de Damasco -en el que según EEUU murieron 1.429 personas- han dado positivo por exposición al sarín. Por ello Kerry está convencido de que el Congreso va a dar finalmente al presidente Obama la autorización solicitada para una acción militar contra el régimen de Bachar Al Asad.
Entre tanto, la Coalición Nacional para las Fuerzas de la Oposición y la Revolución Siria ha denunciado que el régimen de Bashar al Assad ha evacuado las instalaciones militares y ha trasladado allí a presos para ser usados como escudos humanos ante un eventual ataque de Occidente.
