La OIT pide a Europa que reconsidere la austeridad y apueste por el crecimiento

Raymond Torres, director del Instituto Internacional de Estudios Laborales de la Organización Internacional del Trabajo, ha dado un tirón de orejas a Europa y a su apuesta por la austeridad. Está  comprobado que la austeridad no ha funcionado. Se suponía que iba a dar más seguridad a los mercados y que podría crearse una senda de crecimiento de la inversión y el empleo, pero la inversión productiva sigue cayendo y la confianza de los mercados es débil. Hay que reconsiderar esta austeridad en toda Europa”, ha sentenciado Torres. Ha puesto su atención en el sector financiero, del cual dice estar sorprendido de que no se haya ajustado a la realidad después de cinco años de crisis. Concretamente en España, dice que se ha tardado mucho tiempo en reconocer las inversiones no rentables y exigir responsabilidades al sector financiero.

No obstante, no todo han sido reprimendas. Desde la Organización Internacional del Trabajo reconocen que últimamente se ha avanzado en Europa: “sobretodo con la decisión para 2014 de una supervisión única para el sistema financiero europeo. Pero se puede hacer mucho más empezando por la reconsideración de las políticas de austeridad con objetivos de déficit mucho más realistas y en cómo se lleva a cabo su reducción”.

Torres también se ha referido a la última reforma laboral: “Es evidente que el mercado laboral español no funcionaba, y que había que reformarlo, pero había que haberlo hecho antes y analizar mejor qué se necesitaba”. Y es que, explica, hacer la reforma en un momento en que se agiliza el despido y no se crea de empleo, el impacto positivo teórico es muy pequeño en la práctica. Y ante esta tardanza, reflexiona: “no me sorprende la cifra de paro”.

Contra el desempleo juvenil

La reconsideración del modelo macroeconómico y de la política financiera a la que se refería antes, dice, es necesario para la integración laboral de los jóvenes, un colectivo que se fa afectado por un paro superior al 55%. Y es que aunque cree que la formación dual ayudaría a paliar el desempleo juvenil, Torres señala que “el verdadero problema es que no hay creación de empleo, lo que repercute de forma especial en los jóvenes que tienen que entrar en el mercado laboral”. Y es que a su juicio, “hasta que el proceso de creación de empleo no despegue, es inconcebible que el desempleo juvenil empiece a disminuir de forma importante”.

Como medida concreta, apuesta por medidas como las que aplicó Suecia tras atravesar una crisis financiera similar a la española: “pusieron en marcha un sistema de garantías para la activación de empleo, por lo que los jóvenes desempleados tenían la posibilidad o de volver a estudiar o de recibir un subsidio y ayuda decidida para la búsqueda de un puesto de trabajo. Se hizo en los países nórdicos y no veo por qué no podría aplicarse en España”.

Precisamente sobre el papel de los servicios públicos de empleo, el director del Instituto Internacional de Estudios Laborales ha asegurado que “debe ser absolutamente central, siempre que funcione de verdad”. Para que esto sea así, ha defendido que debería haber 1 orientador por cada 100 desempleados, mientras que en el Sur de Europa este ratio sube hasta los 400. Y sobre el subsidio de desempleo, ha defendido que “tiene que estar vinculado a la búsqueda de empleo”, algo que ha considerado una contrapartida natural a ese apoyo individualizado. Eso sí, advierte que “no se puede hacer caer la sospecha de que los desempleados no buscan empleo. Basta con ver las cifras de paro, para entender que esto no puede ser así, al menos en la mayoría de los casos”.