Rosell pide una amnistía fiscal para los empresarios

Ser solventes merecen su segundo punto y aparte. Rosell recuerda que en 2002, el coste en subsidios era de 9000 millones de euros, mientras que este año pronostica que ascenderá a 30.000. Una situación que Rosell achaca a la pasividad de los desempleados y que según subraya, también hay que reformar. Los desempleados no deberían decir no a ningún trabajo" ,ha comentado el presidente de la CEOE al diario Expansión.

En este sentido, la cabeza de la patronal cambiaría el coste de la cobertura, el número de beneficiados y el funcionamiento de los servicios públicos de empleo, que según Rosell, "está claro que no funcionan ".