Comisiones Obreras y UGT han convocado más de 80 manifestaciones y concentraciones por todo el país para conmemorar el Primero de Mayo, día Internacional del Trabajo. La de este año está siendo una celebración marcada por la reforma laboral, por la tasa de desempleo que supera los 5.600.000 de parados, y por la recesión. Laa cabecera de la manifestación central de Madrid se ha situado en Cibeles, desde donde han partido los líderes de UGT y Comisiones Obreras, en su recorrido hacia Sol.

Cándido Méndez ha acusado al Gobierno de "querer destruir los derechos de los trabajadores" y ha alabado el trabajo de los funcionarios, mientras que Ignacio Fernández Toxo, ha dicho que "no le extrañaría que el año acabara rebasando la cifra de los 6 millones de parados como fruto de la política del Ejecutivo". En esta línea, el secretario general de CCOO destaca que, mientras el PP se está centrando en la reforma laboral y tiene en el "punto de mira" la de las pensiones, se está olvidando de la más importante, la financiera, ya que es la que permitirá que vuelva a fluir el crédito. Por ello, emplaza al Ejecutivo a que fije objetivos "concretos" de recapitalización de entidades para que pueden relanzar su actividad.

Como alternativa piden a Mariano Rajoy que preste atención al cambio político que se está produciendo en Francia, y "deje de improvisar" cada viernes en el Consejo de Ministros con reformas que tan sólo recortan, según afirman ambos secretarios, "las libertades y los derechos fundamentales de los ciudadanos".

Además los sindicatos insisten en que las protestas no acabarán hasta que el gobierno no cambie su rumbo tanto en lo referente a los recortes como en cuanto a la reciente reforma laboral.