Nuestro Tesoro ha colocado 3.890 millones de euros, es decir, ha superado con creces el objetivo máximo previsto de 3.500 millones. En el caso de los títulos a un año, ha vendido 2.390 millones y lo ha hecho con un rendimiento medio del 2,556%, lejos del 2,797% de la anterior subasta de este tipo celebrada en noviembre.

Respecto a las letras a más largo plazo, a 18 meses, ha colocado 1.500 millones de euros y la rentabilidad también se ha reducido, ha pasado del 3,03%, hasta el 2,77%. También arroja buenas cifras el ratio de cobertura, que se ha multiplicado por 2,5, ya que las entidades han solicitado cerca de 10.000 millones de euros.

Superada esta prueba, el Tesoro mira ya al próximo jueves donde espera colocar hasta 2.000 millones en deuda a largo plazo.