La troika aprueba la labor de España en el cumplimiento de las condiciones del rescate bancario pero considera insuficientes las reformas en el ámbito macroeconómico. Cree que son necesarios más esfuerzos para sanear las cuentas públicas y apunta directamente a la reforma de las pensiones. El BCE, la Comisión y el FMI alertan del déficit de la Seguridad Social y reclaman el aumento de la edad efectiva de jubilación.

En materia de impuestos, la troika recuerda al Gobierno que tiene margen para subir algunos tipos de IVA reducido y pide nuevos impuestos medioambientales, especialmente sobre los carburantes. Del mismo modo, los inspectores europeos instan al Ejecutivo a acelerar la puesta en marcha de la oficina de control presupuestario para que ejerza un "papel eficaz" en la vigilancia de los gastos de las Administraciones de cara a 2014.

Además, piden que aplique de forma más estricta la ley de estabilidad presupuestaria a las comunidades que inclumplan los objetivos de déficit.

Sobre la reforma laboral, la troika considera que empieza a tener cierto impacto pero de forma muy lenta por lo que pide al Gobierno que evalúe su funcionamiento y señala como prioridades la reorientación profesional, la mejora en la formación de los trabajadores y la modernización de los servicios públicos de empleo.