Quedan a penas tres días para que acabe el año y en Estados Unidos demócratas y republicanos continúan sin ponerse de acuerdo sobre el temido precipicio fiscal: una combinación de subidas de impuestos y recortes automáticos de gasto público que entraría en vigor el 1 de enero y que según los expertos empujaría al país norteamericano a una nueva recesión económica. Pero también hay que reducir el déficit y aumentar los ingresos.Y en el cómo y de dónde es dónde surgen los desentendidos entre ambas fuerzas políticas que intentan llegar a un acuerdo para evitar la recesión y el nerviosismo en los mercados. 

Los medios estadounidenses que aseguran que los demócratas encabezados por Harry Reid en el senado trabajan en un texto que pueda obtener el apoyo de la cámara. Habrá que ver que dice la minoría republicana en el senado, aunque se trataría de un documento provisional para prorrogar los recortes impositivos que aprobó el Gobierno de George Bush para la mayoría de ciudadanos excepto los más ricos.