Juan Velarde, catedrático emérito de la Universidad Complutense, ha calificado la subida del IVA como una medida “muy dura” aunque considera que no hay más remedio que aplicarla porque hay que “incrementar los ingresos y simultáneamente recortar el gasto público”. 

El IVA general sube hasta el 21%, el reducido hasta el 10% y el super reducido se mantiene en el 4% y Rafael Pampillón cree que esta medida supone un impacto a la economía pero también tiene un lado positivo. Por un lado considera que el aumento del gravamen sobre el valor añadido “desincentiva el consumo porque quitará renta disponible a los ciudadanos”, de hecho la califica de una medida “dura y dolorosa” que va a deprimir aún más la economía. A pesar de ello la considera necesaria y cree que el Gobierno se ha resistido a tomar pero, a su juicio, finalmente “no le ha quedado más remedio”. El aspecto positivo que Pampillón destaca de esta subida tiene que ver con las exportaciones. Cree que va a mejorar el saldo exterior porque “tendrá superavit la balanza comercial y menos déficit la balanza por cuenta corriente”.

REBAJA COTIZACIONES SOCIALES

La subida del IVA va acompañada de una rebaja de las cotizaciones sociales en un punto en 2013 y en dos puntos en 2014, y Pampillón aplaude esta iniciativa por considerar que “abarata el empleo, reduce el coste de la mano de obra y mejora la competitividad de la economía”. 

A su juicio la solución para nuestro país pasa por “la devaluación interna” que debe consistir en “frenar las importancias a través de la subida del IVA y  reducir los costes laborales”.

RECORTE EN LA PRESTACIÓN POR DESEMPLEO

La prestación por desempleo se verá reducida un 60% durante los seis primeros meses para pasar después a quedarse en el 50%. El Gobierno lo anuncia con la intención de incentivar la búsqueda de trabajo y Rafael Pampillón ha aplaudido la medida. Denuncia que “la prestación era demasiado generosa y no genera búsqueda de empleo en el corto plazo”; cree además que supone un gasto público “tremendo” que España no se puede permitir.

“Es un lujo el pagar dos años a un desempleado”, ha denunciado el economista. Apuesta por buscar la manera de que el desempleado busque trabajo “dentro o fuera de España” y se debe “quitar presión en el mercado de trabajo”.

REDUCIR GASTOS VS SUBIDA DE IMPUESTOS
 
Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo (BCE), insiste en que la solución pasa por reducir el gasto y no subir los impuestos para no penalizar el consumo y la economía y analista económico, Rafael Pampilón, cree que en España ya se están llevando a cabo “algunos criterios de reducción”, aunque solicita un mayor esfuerzo: “Faltan medidas contundentes en los ayuntamientos y en las autonomías". En este sentido cree que hay que insistir en la reducción del gasto público sobre todo en el “improductivo” e intentar evitar aquella reducción del gasto que tenga que ver con el crecimiento y la productividad.

Como ejemplo, subraya que  “peor que un parado es el señor que tiene un despacho y que no genera producción, ni añade valor a la economía”. Por esta razón, requiere una reducción del número de empleados públicos “que hacen un trabajo que no es necesario porque es ineficiente”. En su reflexión destaca que hay mucha “mano de obra ociosa” en el sector público y de “baja productividad que hay que eliminar”, porque es necesario recortar el gasto para reducir el déficit.

MEDIDAS TARDÍAS Y BONDADES DE LAS REFORMAS
 
Rafael Pampillón entiende que algunas medidas como acelerar la entrada en vigor de la subida en la edad de la jubilación se podrían haber adelantado, aunque mira al futuro con entusiasmo. Destaca los avances que España está consiguiendo: “se está reduciendo el déficit y el desequilibrio del sector público”  y considera que el sistema financiero poco a poco “se va solucionando y recapitalizando”. Eso sí hace hincapié en los problemas que están por resolver en el mercado de la vivienda y el mercado de trabajo, a los que califica como un lastre para la recuperación de la economía de nuestro país.