Casasola, cerveza artesanal

Alfonso Perdomo-Spinola nos recuerda en la entrevista de Edición Limitada que esta cerveza nace y se hace en España, pero con inspiración italiana. La finca Casasola de la familia Molero es el lugar donde se cultiva el cereal, la cebada, para hacer esta cerveza tradicional.

Una vez recogida la cebada, se deja crecer un poquito y se corta el proceso de crecimiento. Eso es el malteado. Después esa malta se tuesta más o menos, para hacer la rubia o la tostada. Después se fermenta con el lúpulo y se deja en los barriles o tanques para esperar ser embotellada. Una vez en botella, se fermenta de nuevo, produciendo el carbónico de modo natural.

Una cerveza premium, como es Casasola, ideal para una comida especial, para disfrutar en un momento único. A pesar de la crisis, nunca es mal momento para una aventura empresarial apasionante, como nos reconoce Alfonso. Sobre todo si se hace con ilusión y después de haber preparado el proyecto durante años.

Benedictina o Silos, hay que agradecer a los monjes del medievo que descubrieran la cerveza, el whisky y otros placeres que sientan muy bien en dosis moderadas.