El mágico universo del Jazz

El proyecto creado por Walter Sax Association of Musicians, con la Walter Sax Big Band como buque insignia, y el Teatro Sanpol, pretende transmitir el valor de la música a los más pequeños. El próximo 6 de abril el Teatro Sanpol inaugura, a medio día con Walter Sax Big Band (WSBB), un ciclo de cuatro conciertos didácticos. Titulado “El nacimiento de una Big Band”, este primer encuentro enseñará a niños y jóvenes los instrumentos y secciones de una Big Band, además de introducirlos en sus orígenes históricos.Los otros tres encuentros están previstos para los sábados 20 de abril, y 11 y 25 de mayo, también a las 12.00h.  

Walter Geromet nos acerca al mágico universo del Jazz:

– Entender el jazz como una forma de educar y de transmitir arte parece un gran reto, aunque ser director de música y saxofonista ayuda…

Ayuda pero sigo en constante aprendizaje; tanto de los alumnos como de los componentes de la banda. Todo ello hace que crezca cada día. 

– Dices estar comprometido con la faceta más humana de la música…

Quiero transmitir que la música es un arte y un lenguaje profundo que nos puede ayudar a desarrollarnos como persona. Incluso puede servir para resolver problemas.

– ¿Sabemos valorar la música?

No demasiado. Es una critica incluso a mí mismo. Deberíamos valorar más el arte y la música y, llegar a conocerla.Las nuevas tecnologías pueden hacer que nos quedemos en la superficie y no profundicemos. Me apena que cada vez sean menos los que escuchen en profundidad la música o la vivan en directo.

 

– ¿Falta educación musical?

Quizás falta sensibilidad para apreciarla. La educación no es sólo lo que aprendes en la escuela, implica más facetas. Puede que falten valores para percibir el arte de la música.

-Para ti el Jazz es…

Una forma de vida, de relacionarte con los demás y una forma de expresión. Es un lenguaje, como la palabra. Y como tal, necesita saber de pronunciación y de reglas, aunque haya algo de improvisación implícito. 

-El saxo: una extensión del cuerpo y un sentimiento

Para mí no tiene un sentimiento específico. Es como la música, tiene muchos colores…Con él puedes expresar cualquier sensación y según cómo lo interpretes te puede permitir unas u otras posibilidades expresivas. El saxo vendría a ser como una extensión de mi cuerpo, pero también he tocado otros instrumentos básicos para un músico como son el piano y la guitarra, para conocer la estructura vital de la música y la creación de la melodía.

-¿Puede llegar a ser un medio de vida?

Se puede vivir de la música, teniendo muchos proyectos e ideas. Pero es necesario diversificarte en la creación y en la enseñanza. Lo básico es tener apertura mental, aunque, reconozco que ahora es complicado.

-Visto así todos podemos ser músicos

Todo el mundo puede hacer música sacándole el máximo provecho según sus posibilidades. Todos hemos nacido para eso, aunque nos hemos encerrado en nosotros creyendo que el arte no es para todos. Como humanos todos somos artistas. Unos los sienten más que otros, pero está ahí…

– Los niños lo tienen más fácil

Los niños tienen más capacidad para absorber información y para aprender pero no tienen objetivos marcados. Los adultos, sin embargo, cuentan con esa ventaja.

– Parece que nos estamos perdiendo a grandes músicos desconocidos

Seguro.Una historia cuenta que uno de los violinistas más importantes del mundo tocó durante varias horas en el metro y no fue reconocido. Todo es relativo, incluso el éxito.La suerte puede crearla uno mismo. Admito que es difícil entrar en el mundo de la música para vivir de ella, pero no imposible.

La WSBB debe su nombre a su director, Walter Geromet. A su vez, el término Sax identifica a una formación única, donde más de 15 saxofones interpretan vientos, cuerdas y percusiones de todo tipo. Walter Geromet está comprometido con la faceta más humana de la música y afronta su nuevo proyecto desde “el afán de trabajar en pro de la excelencia”. Constanzo Lainzi ejerce como director adjunto. Ambos maniobran la progresión artística de la WSBB.

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