Lafarge: «El 60% de nuestra actividad se produce ya en emergentes»

Uno de los aspectos a resaltar de las últimas cuentas presentadas por Lafarge es el comportamiento de su negocio en los tres últimos meses del año. En ese cuarto trimestre, el grupo francés consiguió un beneficio de 100 millones de euros, frente a las pérdidas de 3 millones registradas el mismo periodo del curso anterior. Ese retorno a la senda del beneficio se basa principalmente en la diversificación internacional de Lafarge. “El 60% de nuestra actividad está hoy en países en vías de desarrollo, que actualmente son generadores de mucha riqueza”, explica Isidoro Miranda, director general de la compañía en España.

 

Ese optimismo que desprenden los emergentes contrasta plenamente con el escenario reinante en Europa. “El mercado español cayó el año pasado un 34%, el griego en niveles similares y el francés un 7%”, asegura Miranda, matizando que el panorama global sí apunta a una salida de la crisis y a un “cierto dinamismo”.

Por lo que respecta a nuestro país, Isidoro Miranda califica como “brutal” la caída que ha venido sufriendo el mercado de la construcción desde su pico de 2007, previo a la crisis. “Ese pico en España fue demasiado grande. A partir de ahí, todo el sector se ha tenido que adaptar para dar una oferta al público y reducir personal”. No en vano, Miranda explica cómo Lafarge ha tenido que recortar su plantilla a la mitad y reducir su número de centrales de hormigón de cien a tan solo cuarenta en este periodo. Todo ello ha permitido a Lafarge reducir costes por valor de 410 millones de euros en el último curso, una disminución a la que ha contribuido de una manera destacada la división española.