Las acciones de Bankia vuelven hoy al mercado tras conocerse el verdadero agujero de la entidad este fin de semana. 23.000 millones de euros que va a recibir del erario público, y que le van a servir para hacer un auténtico saneamiento de sus balances, muy superior al exigido por el Gobierno.

Un ajuste con el que se espera se pueda facilitar la venta de activos –inmuebles y cartera industrial- para compensar el estancamiento del negocio bancario. Una ayuda que va a llegar después de que Goirigolzarri y su equipo hayan calculado que unos 13.000 millones en créditos están en dificultades o subestándar, es decir, en riesgo de impago. Esto supone aplicar una provisión media del 30%.

No sólo eso, sino que ha puesto en precio de mercado los activos adquiridos a las promotoras, que pasan de más de 8.000 millones, a algo más de 2.000 millones, y los embargados a particulares pasan de 3.500 millones a algo más de 1.800 millones. Un auténtico lifting con el que Bankia espera recuperar la confianza del mercado, que hoy va a llegar también a su matriz, al Banco Financiero y de Ahorro.