El objetivo de Bruselas es que los bancos nacionalizados salgan de la órbita del Estado en cinco años. Para ello ha impuesto que tanto Bankia como Cataluñacaixa como Novacaixagalicia tengan que reducir su tamaño en cerca del 60%, además de recapitalizarse y traspasar sus activos inmobiliarios. El objetivo, que no vuelvan a producirse los errores del pasado, tal y como ha dicho Joaquín Almunia, Comisario de Competencia.

Concretamente, Novagalicia va a recbir una inyección de 5.425 millones de Europa, para lo que deberá recortar su plantilla en un 43% del total así como adelgazar su red en 400 oficinas en los próximos tres años. Unas cifras que incluyen también la venta de su filial EVO. Pero no será lo único. Desde la Comisión Europea, también imponen que la entidad reduzca su operativa a su territorio de origen: Galicia.