Con esta medida , un total de 581 de trabajadores podrían ver como pierden su puesto de trabajo. Eso sí, desde la propia compañía reconocen que se trata de una medida “preventiva” que sólo se llevará a cabo si el Gobierno regional de Cantabria no materializa los compromisos alcanzados. Unos compromisos que pasan por la reducción del céntimo verde o la inclusión de las turbinas de gas en el régimen económico especial a precio de tarifa entre otras medidas.

Mientras, desde el Comité de Empresa temen que si el Ejecutivo “no lleva a la práctica” los beneficios, se encuentren en una situación complicada. Por el contrario, explican que si el Gobierno pone en marcha las medidas, sólo habrá que negociar un total de 100 jubilaciones. Por todo ello, los trabajadores reclaman al Gobierno que “deje su discurso y materialice los compromisos de una vez”.

Todo ello en el mismo día en que Sniace ha dado a conocer que multiplica por más de 7 sus pérdidas en el primer semestre, hasta los 41,1 millones de euros. Por su parte, la cifra de negocio cae entre enero y junio un 47%, hasta alcanzar los 39 millones de euros.

En la actualidad, la plantilla está inmensa en un ERE de suspensión de dos meses. En este tiempo, dirección y sindicatos deben alcanzar un acuerdo sobre las prejubilaciones y también abordar una rebaja salarial. Sin embargo, ahora parece que el futuro de la compañía depende de que las administraciones cumplan los citados compromisos.