-¿Cuál es la receta del éxito?

Secretos no hay muchos. Solo ilusión trabajo honestidad y darle tiempo a los proyectos. No hay nada especial en nuestro proyecto empresarial. Mi padre decía que le gustaba llevar el “tajo limpio”, las cosas actualizadas, no llevar lastre en la vida que cuando vienen momentos adversos no te permiten digerirlos.

-Llega a la empresa con 14 años, ¿cómo lo recuerda?

Mi padre tuvo la osadía de hacerme jefe de compras de dos tiendas que teníamos y hablando con los representantes fui adquiriendo conocimiento comercial y empresarial, y aquí estoy . Ha habido progreso por la perseverancia al hacer las cosas.

-A la vista de los resultados no le ha ido mal…

Dicen que el éxito y el fracaso no existen, es la consecuencia del hacer. Si tu haces cosas que sumen tendrás un resultado, y si haces cosas que resten ese resultado será más negativo

-Un día en el Grupo Fuertes decidieron exportar. ¿Cuál es la presencia internacional?

Estamos trabajando prácticamente con el mundo entero. Trabamos con más de 80 países y dado nuestro volumen pensamos en el consumo exterior porque en la cuota de mercado en España ya estamos a la cabeza de las industrias cárnicas españolas. Un 20% de nuestra facturación está en la exportaciones y el objetivo es crecer mas en el exterior que dentro.

-¿Qué consejo les daría a los que están empezando a exportar?

Que hay que tener en cuenta que ya no somos españoles ni europeos solamente. Tenemos que ser conscientes de que igual que podemos salir pueden entrar, y por eso tenemos que tener una visión más amplia. Tenemos que pensar en el mercado interior, pero también en el exterior si tienen un determinado volumen

-¿Es más difícil empezar con un negocio ahora que hace 60 años?

Son circunstancias distintas. Recuerdo que cuando empezamos no había nada de tecnología y teníamos que actuar mucho con la intuición. Hoy hay muchos medios y mucha información
pero igual que lo tienes tú lo tiene tu competencia, y por eso hay que estar muy atento. El libre mercado es bonito y es muy duro. Y Aquellas empresas que no tengan el espíritu de luchar contra el libre mercado tendrá dificultades.

-¿Cómo va a cerrar el año el Grupo Fuertes?

Tenemos previsto crecer entorno a los dos dígitos porque hemos mejorado nuestras instalaciones y aunque el sector no va a crecer a este nivel, creo que nosotros sí lo vamos a conseguir.

-Han conseguido mantener el empleo durante la crisis. ¿Cómo se consigue?

Ha sido un reto social muy importante. Los empresarios también tenemos un sentimiento sobre las nuestro equipo humano. Hemos hecho un esfuerzo muy grande para no bajar la producción y no tener que despedir. Estamos muy satisfechos de no haber despedido en estos cinco años a pesar de que pueda haber habido motivos por la crisis.

-¿Cual es el principal problema que tienen los empresarios?

La alta competencia, que es un problema para quien no tiene espíritu de superación y puede ofrecer al consumidor productos competitivos. No todo el mundo tiene el deseo de competir. Pero esa es la labor que tenemos los empresarios.

-Si no hubiera sido empresarios que hubiera sido…

Empresario. Yo soy de vocación, es una cosa que la siento. Un empresario no es un negociante, es un coordinador de la ciencia, el trabajo y el dinero. Ser empresario es un proyecto a largo plazo.