La querella presentada por la Fiscalía de Barcelona continua su cauce y ha sido aceptada por el juzgado de Gavà. De esta forma, tanto Leo Messi como su padre, Jorge Messi, deberán acudir a los tribunales a prestar declaración en calidad de imputado el próximo 17 de septiembre.

En un breve auto, la magistrada que instruirá el caso se ha limitado a aceptar la causa por tres presuntos delitos contra la Hacienda Pública. Además ha ofrecido al letrado del Estado la posibilidad de personarse, si lo considera oportuno, en el procedimiento por los daños que habría causado a las arcas públicas el presunto fraude de los imputados.

La fiscal que presentó la querella, Raquel Amado, entiende que el jugador ocultó los ingresos publicitarios correspondientes a los años 2007, 2008 y 2009, a través de la creación de sociedades ficticias, a las que cedió sus derechos, con sede fiscal en países como Uruguay o Belice.