Premio al esfuerzo

La fortaleza y tenacidad de David Ferrer es indiscutible. Por ello, el alicantino es uno de los jugadores con más reconocimiento en el circuito ATP, a pesar de no contar con ningún título individual de reconocida importancia. Pero ese único punto flaco en la carrera de Ferru ha pasado a la historia, al proclamarse campeón sobre la pista del Master 1000 de París. Además, el número cinco del ranking mundial es el primer español en levantar el “árbol del triunfo”, el trofeo que recoge el nombre de todos los campeones del torneo parisino.

 

Sobre el papel, David Ferrer se convertía en el gran favorito para alcanzar el título, ya que tanto Djokovic como Murray había caído eliminados en las primeras rondas del torneo. Todo hacía presagiar que esta sería la gran oportunidad del alicantino, por fin, después de haber disputado tres finales anteriormente. Eso sí, nadie contaba con la aparición de un joven polaco de 21 años, número 69 del ranking ATP. Un desconocido, de nombre Jerzy Janowicz, que guarda en su fornido cuerpo dotes de futura estrella de la raqueta. El polaco sorprendió a todos, menos a Ferrer que se mantuvo constante durante toda la final.

 

Ferrer cumple uno de sus sueños y enmarca una temporada que puede tener un cierre de oro, la Copa Davis. Del 16 al 18 de noviembre, en Praga, es la oportunidad de Ferrer de sellar una temporada de ensueño. Precisamente, hoy Alex Corretja ha hecho oficial la lista de cuatro jugadores que formarán “La Armada Española” en la finalísima ante República Checa. Nico Almagro, Marcell Granollers, Marc López y, el reciente campeón de París, David Ferrer serán los encargados de traer a España la sexta ensaladera.