02:30 a.m. (hora española), noche del sábado al domingo, en ese momento el tempo mundial del baloncesto se paraba. Esa era la hora exacta en la que el 'Mago' de El Masnou volvía a las pistas nueve meses después del partido frente a los Lakers, en el cual se lesionó gravemente su rodilla izquierda. El Target Center de Minneapolis se ponía de pie para rendirse al talento innato de Ricky Rubio.

Y la llegada del base catalán no le pudo venir mejor a su equipo. Con Rubio en pista, Minnesota remontó el partido frente a unos Mavericks que bien dirigidos por Derek Fisher no pudieron hacer nada para detener la ilusión de un equipo contagiado por la vuelta de Ricky y con Kirilenko, Shved y Pekovic como principales referencias ofensivas. 9 puntos, 4 rebotes, 9 asistencias y tres robos. Ese fue el balance en el reencuentro de 'Tricky' con la afición de los Wolves. Esta noche, nueva cita con Minnesota y Rubio frente a los Magic, que echan mucho de menos a uno de los puntales de la Liga, el pívot Dwight Howard traspasado a Lakers.

Pero esta no es la única alegría que nos dejan los españoles en la NBA este fin de semana. José Manuel Calderón logró ayer su segundo triple doble de la temporada con 18 puntos, 10 rebotes y 14 asistencias contribuyendo a la victoria de los Raptors frente a unos Rockets que echaron en falta la aportación de la sensación de la temporada pasada, Jeremy Lin.