Maverick Viñales sorprendía al mundo del motociclismo el pasado jueves, cuando daba por finalizada su temporada y abandonaba precipitadamente el circuito de Sepang, sin ni siquiera haber subido a la moto. El piloto catalán señalaba directamente al equipo que dirige Ricard Jové, jefe de Blusens Avintia, como el principal motivo de su marcha, y al bajo nivel mostrado durante la segunda parte de la temporada.

Pero esta mañana Viñales hacía público un comunicado donde confirmaba su presencia en el Gran Premio de Australia, y aprovechaba para pedir disculpas a todos los que se hubieran sentido ofendidos por su precipitado comportamiento en el Gran Premio de Malasia. La intención del piloto catalán es poder luchar por el subcampeonato -ya que el mundial ya es oficialmente de Cortese-, y poder cosechar la victoria en el Gran Premio de la Comunidad Valenciana, última cita del campeonato.

En el comunicado oficial, Maverick muestra su arrepentimiento por su comportamiento, y asume sus errores. Además, el piloto ha señalado que no estaba preparado mentalmente para subirse encima de la moto en Sepang, pero que aun así, no debería haber abandonado el circuito de esa forma tan brusca ni haber realizado ciertas declaraciones en caliente. Este regreso puede suponer un amistoso reencuentro con su equipo, con el fin de acercar posturas de cara a la próxima temporada.